En algún punto, tenemos que dejar de fingir que las “modelos de OF” no son meretrices modernas que no solo venden actividad sexual, sino que la graban y lucran prolongadamente con ella. Bonnie Blue, una “creadora de contenido” en OnlyFans, ha sido la última en anunciar que “ha roto el récord mundial” teniendo relaciones íntimas con 1,057 hombres en un lapso de tan solo 12 horas. ¿Ya podemos indignarnos?
Hace un tiempo se viralizó un documental sobre Lily Phillips, una meretriz británica que tras sostener relaciones sexuales con 101 hombres en menos de 24 horas y dejar constancia en la plataforma Only Fans, dijo que quería aumentar su “meta” y lograr 1000 hombres en un día. Sin embargo, en el documental podemos ver a la muchacha genuinamente destrozada emocionalmente después de vivir dicha experiencia traumática. La evidencia podría indicar que la superó, pero la realidad es muy distinta.
Lily Phillips no sólo no va llegar a tener sexo con mil hombres en un día, sino q posiblemente termine muert*. Lesiones, hemorragia interna, infecciones, shock hipovolémico, trauma físico y psíquico, etc. Redoblar la apuesta no es confirmación de disfrute, es autodestrucción
— Lupe Batallán (@batallan_lupe) December 15, 2024
A pesar de la naturaleza de la nueva “meta” trazada, las declaraciones de Phillips pasaron a ser un reto para otras mujeres que practican la prostitución digital (dejemos de fingir que no lo es) y Bonnie Blue “rompió” el récord antes de que Phillips lo tentara. Tuvo relaciones sexuales con 1057 hombres en un lapso de 12 horas.
El evento, llevado a cabo en Londres el pasado sábado, fue publicitado por la misma Bonnie Blue, de 25 años, quien afirmó haber superado el récord de Lisa Sparks, quien en 2004 tuvo relaciones con 919 hombres en 24 horas. Según los cálculos, esto implicaría que Bonnie pasó menos de 41 segundos con cada hombre:
En un video publicado en su página de TikTok, Bonnie agradeció a los “apenas legales y apenas respirando” que participaron en el acto, afirmando que su piel lucía mejor que nunca tras la “experiencia”.
Lucía Meléndez ofrece una perspectiva contundente desde la psicología: “La prostitución es siempre violenta, abusiva, denigrante y traumática, no hay posibilidad de que no lo sea”. Explica que para sobrevivir a esta práctica, muchas mujeres recurren a la disociación, un mecanismo de defensa psicológico que les permite desconectarse de la realidad de su abuso:
La mente de la mujer puede ‘quedarse en blanco’, como cualquier objeto y con la repetición se pueden acostumbrar, verlo normal; pero es solo una percepción de la realidad distorsionada por la magnitud del nivel de estrés al que han sido sometidas. No cambia la realidad de la violencia sexual.
Lucía Meléndez para VotoCatólico, 13 de Enero del 2025
Meléndez también subraya que los aplausos, el dinero y el reconocimiento social actúan como un paliativo que motiva a las mujeres a continuar en esta situación, escondiendo los síntomas postraumáticos que enfrentan.
En el 2020, cuando vivíamos la cuarentena por la pandemia del COVID-19, se viralizaron contenidos de mujeres que “sostenían” a sus familias con el uso de la plataforma de prostitución digital OnlyFans. Pronto se volvió la meta de muchas jóvenes e incluso se hacen llamar “modelos” de OnlyFans para ocultar su verdadero oficio. Lucrar con el sexo no solo es desafortunado, es triste y peligroso.
En una entrevista con nosotros, Lupe Batallán explicó que algunas inclusive hacían este contenido sin recibir retribución alguna, esperando que “funcione” para poder ganar una miseria. “Recordemos que la pornografía es la puerta de entrada a la prostitución”, señaló Batallán al explicar la naturalización del contenido XXX, algunos meses antes de la publicación de su libro Calladita te ves más bonita, una respuesta crítica sobre la sexualidad.
No cualquiera se abre un OnlyFans. Lo hacen personas extremadamente vulnerables. Haces actos sexuales para que te paguen, por definición es prostitución. Es más, no es necesario que haya penetración para que haya prostitución, el problema de fondo es la objetivización de la persona que permite que la compren sexualmente.
Guadalupe Batallán para VotoCatólico, Abril del 2023
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Cualquiera que tenga un celular, puede abrirse una cuenta de OnlyFans. Hay informes sobre esto: el 10% de las cuentas de OnlyFans se llevan el 70% de los ingresos mensuales de millones de usuarios, aproximadamente; el 90% que queda de ese 10, se distribuye el 30% restante. Eso ya es una baja importante. Ahora, vamos a los estudios de cuánto se gana en lo general. Si vos buscás cuál es la media, es 0 dólares y el siguiente valor más frecuente es 5 dólares, es decir, el valor que paga un solo suscriptor. Fijate el nivel de mentira que manejan estas plataformas [prometiendo prosperidad a través del consumo de pornografía] cuando están vendiendo gratis su dignidad.
Que una mujer como Bonnie Blue sea celebrada por un acto como este refleja el nivel de desensibilización de nuestra sociedad frente a la degradación humana. ¿Qué tipo de mensaje estamos enviando a las nuevas generaciones al normalizar, e incluso glorificar, la explotación sexual?
Las plataformas como OnlyFans, que disfrazan la prostitución de empoderamiento y emprendimiento, no son ajenas a esta problemática. Están creando un mercado que no solo perpetúa la violencia sexual, sino que la institucionaliza como una opción de vida “aceptable”. En palabras de Meléndez, estas mujeres se convierten en objetos que venden la ilusión de placer, mientras su humanidad queda relegada a un segundo plano.
Como sociedad, debemos reflexionar sobre el rumbo que estamos tomando. Si seguimos celebrando actos como los de Bonnie Blue, no solo contribuimos a la deshumanización de las mujeres, sino que también perpetuamos un ciclo de abuso y trauma que las afecta profundamente, sin mencionar los daños físicos.
¿Es este el legado que queremos dejar? La respuesta debería ser un rotundo NO. Es hora de indignarnos, de hablar y de actuar para poner fin a la glorificación de la explotación sexual. La dignidad humana no es negociable y el silencio solo perpetúa el abuso. Es hora de indignarnos. Somos católicos, no liberales. No podemos “respetar irrestrictamente el proyecto de vida del prójimo” porque nos importa el prójimo y no podemos “respetar” la explotación sexual. Como decía San Juan María Vianney: “El mayor acto de caridad hacia el prójimo es sacar su alma del infierno“. No podemos seguir callando por corrección política, es hora de frenar la pornografía, una barbarie disfrazada de “industria” que además genera tráfico de personas, especialmente niños.
Para cerrar, vale la pena resaltar lo que publicó Matt Walsh en su cuenta de X: “La prostitución solía ser casi exclusivamente el dominio de las mujeres jóvenes, pobres y desesperadas. Ahora, gracias a OnlyFans, la prostitución se ha convertido en una posible opción profesional para mujeres de clase media alta con estabilidad financiera. Es extremadamente deprimente y profundamente aterrador pensar en cuántas mujeres de este último grupo han aprovechado la oportunidad de ser prostitutas”.
Prostitution used to be nearly exclusively the domain of poor desperate young women. Now thanks to Only Fans prostitution has become a possible career choice for financially stable upper middle class women. It is extremely depressing and deeply terrifying to consider how many…
— Matt Walsh (@MattWalshBlog) January 13, 2025