Los senadores pro vida volvieron a presentar esta semana una legislación que prohibiría el tráfico de partes del cuerpo de niños abortados y prohibiría al gobierno promover la investigación con tejido fetal proveniente de abortos.
El senador John Kennedy, republicano por Luisiana, y la senadora Cindy Hyde-Smith, republicana por Mississippi, volvieron a introducir el 12 de marzo la Ley de Protección de la Vida y la Integridad en la Investigación, según informa el sitio web de Kennedy.
La ley impediría que todos los departamentos, agencias y oficinas federales aprueben, realicen o financien investigaciones que involucren tejidos de niños abortados.
También crearía una prohibición total de solicitar o aceptar tejido extraído de un feto después de un aborto inducido.
“Existen maneras éticas y científicamente válidas de realizar investigaciones con tejido fetal sin depender de partes del cuerpo de bebés abortados”, declaró Hyde-Smith. “Sin embargo, el gobierno federal actualmente gasta millones de dólares de nuestros contribuyentes cada año en financiar investigaciones que utilizan tejido de abortos, lo que fomenta la práctica deshumanizante del tráfico de tejido fetal”.
La legislación no prohibiría la investigación con células madre no fetales. El sitio web de Hyde-Smith afirma que investigadores utilizaron células no fetales para desarrollar insulina para tratar la diabetes y Herceptin para el cáncer de mama. También afirma que la sangre del cordón umbilical ha tratado a miles de personas con trastornos sanguíneos, y que las células madre adultas han salvado la vida de más de un millón de personas.
El sitio web de Hyde-Smith informa además que, en 2023, los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) destinaron 53 millones de dólares a la investigación con tejido fetal humano. Se prevé que la inversión alcance los 55 millones de dólares en 2025.
“La creación de un mercado financiado con fondos públicos para los bebés perdidos por aborto es una práctica monstruosa y bárbara desde su inicio. Todo bebé, incluso aquellos perdidos por aborto, merece ser tratado con decencia y respeto, no como experimentos científicos”, declaró el representante Bob Onder, republicano por Misuri, quien presentó la legislación ante la Cámara. “Me enorgullece presentar esta legislación para erradicar esta práctica”.