En su discurso del Ángelus del domingo por la tarde, el Papa Francisco reflexionó sobre el valor de las pruebas y destacó la esperanza que se puede encontrar a través de Jesús en los hospitales y otros lugares de atención.
Hablando sobre la lectura del Evangelio que trata sobre la Transfiguración, el Papa Francisco dijo que “Jesús se sumerge en la oración y se vuelve radiante de luz”.
Vatican News informó que el Papa dijo: “De esta manera, [Jesús] muestra a los discípulos lo que se esconde detrás de los gestos que realiza en medio de ellos: la luz de su amor infinito”.
El Papa Francisco reflexionó luego que también aquellos que están enfermos tienen la capacidad de convertirse de igual manera en faros de luz en el mundo.
“Nuestros cuerpos son débiles, pero aún así, nada puede impedirnos amarnos, orar, entregarnos, ser signos luminosos de esperanza los unos para los otros en la fe”, afirmó.
El Papa Francisco también contempló la fidelidad del amor de Dios, recordando a los fieles que Dios nunca nos abandona y acompaña a quienes atraviesan dificultades. Además, agradeció a quienes han estado orando por él durante su estancia de un mes en el Hospital Gemelli, expresando especialmente su amor por los niños que rezan por él y lo visitan.
Concluyó su discurso con oraciones por la Iglesia y por la paz, especialmente en “los países heridos por la guerra: la atormentada Ucrania, Palestina, Israel, Líbano, Myanmar, Sudán y la República Democrática del Congo”.