USCCB Hace Recomendaciones Sobre La IA A Líderes Del Congreso

Varios obispos presidentes de comités de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB) escribieron una carta el 9 de junio a los líderes del Senado y la Cámara de Representantes de Estados Unidos ofreciendo recomendaciones políticas y perspectivas éticas con respecto a la inteligencia artificial (IA).

“No somos expertos técnicos, sino pastores encargados de la preocupación por la vida y la dignidad de la persona humana y el bien común”, escribieron en la carta dirigida al presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Mike Johnson, al líder de la minoría de la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries, al líder de la mayoría del Senado, John Thune, y al líder de la minoría del Senado, Chuck Schumer. 

Los obispos señalaron que los legisladores deben considerar los principios éticos de la dignidad de la persona humana, el cuidado de los pobres y el respeto por la verdad cuando formulan políticas de IA.

“La IA es una herramienta que, al fundamentarse en sólidos principios morales, puede ayudar a superar muchos de los obstáculos de la vida y mejorar la condición humana”, dijeron los obispos. “Pero esta tecnología debería complementar la labor de los seres humanos, no reemplazarlos ni reemplazar sus juicios morales. También debemos evitar la tentación del transhumanismo o de equiparar la IA con la vida humana”.

También señalaron cómo se puede utilizar la IA para crear vídeos falsos de personas y eventos.

“Con el auge de los deepfakes, el uso indebido de noticias e información política para manipular la opinión pública y la difusión de falsedades, algunos utilizan la IA para socavar la dignidad de las personas y el respeto por la verdad”, escribieron. “Los sistemas de IA deben contar con supervisión humana y una rendición de cuentas bien definida para promover la transparencia y procesos democráticos justos”.

En el apartado de consideraciones políticas, los obispos abordaron la vida familiar, el trabajo y la economía, la atención sanitaria, la educación, la vida política y cívica, la guerra, y la energía y el medio ambiente. 

La IA puede utilizarse para mejorar la salud y otros aspectos de la sociedad, pero «su desarrollo ya ha planteado profundas cuestiones morales que afectan al desarrollo humano integral y a la auténtica formación de la persona humana», afirmaron los obispos. «Si no se regula con cuidado, tiene aún más posibilidades de polarizar aún más la sociedad y agravar las desigualdades».

“Por ejemplo, los sistemas automatizados de toma de decisiones —utilizados en áreas como la selección de personal, la aprobación de préstamos, la atención médica, la evaluación de beneficios públicos y el procesamiento de inmigración— pueden reforzar sesgos existentes o introducir un enfoque utilitarista carente de las consideraciones humanas necesarias, con consecuencias potencialmente devastadoras”, señalaron. 

Al reflexionar sobre las políticas relacionadas con la vida familiar, los obispos dijeron que la IA debería utilizarse para fortalecer la vida familiar. 

“Las políticas deben garantizar que la IA no promueva ni mejore usos moralmente ofensivos de las tecnologías reproductivas y la manipulación genética”, escribieron.

“También se deberían promulgar políticas para proteger a los niños en línea y abordar el flagelo de la pornografía, incluida la ‘pornografía infantil virtual’”, añadieron los obispos. 

Al hablar sobre la IA y la economía, los obispos pidieron que se protejan los derechos de propiedad intelectual y los datos para ayudar a los artistas y los esfuerzos creativos. 

Los obispos también señalaron sus preocupaciones de larga data con respecto al desarrollo y uso de armas autónomas letales. 

“El control humano sobre cualquier sistema de armas es esencial para mitigar los horrores de la guerra y el debilitamiento de los derechos humanos fundamentales”, escribieron. 

Desde el punto de vista medioambiental, el uso de IA podría requerir el uso de enormes cantidades de recursos y energía y producir residuos electrónicos que contengan mercurio y plomo, según los obispos. 

“Les pedimos que promuevan políticas que incentiven que las búsquedas de IA y los centros de datos sean más eficientes energéticamente y promuevan el reciclaje responsable de agua y componentes”, dijeron. 

Los obispos explicaron que su lista de preocupaciones no es exhaustiva. Su intención es ayudar a los legisladores en el debate sobre políticas y acciones. 

“Les agradecemos su consideración”, dijeron los obispos. “Les aseguramos nuestras oraciones y nuestra disposición para ayudarles en esta importante y oportuna labor”.

Entre los firmantes se encuentran el obispo William Byrne, presidente del Comité de Comunicaciones de la USCCB; el obispo David M. O’Connell, presidente del Comité de Educación Católica de la USCCB; el arzobispo de la Arqueparquía Católica Ucraniana de Filadelfia, Borys Gudziak, presidente del Comité de Justicia Doméstica y Desarrollo Humano de la USCCB; el obispo Robert Barron, presidente del Comité de Laicos, Matrimonio, Vida Familiar y Juventud de la USCCB; el obispo de la Eparquía Maronita de Nuestra Señora del Líbano, Elias Zaidan, presidente del Comité de Justicia y Paz Internacional de la USCCB; y el obispo Daniel Thomas, presidente del Comité de Actividades Pro-Vida de la USCCB.