El Vaticano reabrió oficialmente los históricos apartamentos papales en el Palacio Apostólico en la tarde del domingo 11 de mayo, según un comunicado de prensa de la Oficina de Prensa del Vaticano.
La ceremonia solemne tuvo lugar después del rezo del Regina Coeli desde la Logia, presidido por el Santo Padre en presencia del Camarlengo de la Santa Iglesia Romana, cardenal Kevin Joseph Farrell, del Secretario de Estado, cardenal Pietro Parolin, del Sustituto para los Asuntos Generales, arzobispo Edgar Peña Parra, del Secretario para las Relaciones con los Estados y los Organismos Internacionales, arzobispo Paul Richard Gallagher, y del Regente de la Casa Pontificia, monseñor Leonardo Sapienza.
La reapertura implicó la retirada de los sellos que habían sido colocados el 21 de abril de 2025, tras la muerte del Papa Francisco.
Los apartamentos papales, ubicados en la tercera planta del Palacio Apostólico, han sido durante mucho tiempo la residencia oficial del Papa. La suite consta de una docena de habitaciones, entre ellas una biblioteca, una sala de estar, un estudio privado, un dormitorio, una enfermería y una capilla privada, así como oficinas para el personal de secretaría y espacios para audiencias privadas con jefes de Estado.
Durante más de un siglo, desde que el Papa Pío X se instaló en 1903, los apartamentos han sido el corazón de la vida vaticana, sirviendo tanto de residencia como de centro administrativo para los sucesivos papas. El Papa Francisco rompió notablemente con esta tradición al optar por residir en la Casa Santa Marta, una casa de huéspedes en la Ciudad del Vaticano.
Ahora que los apartamentos papales están nuevamente listos para ser utilizados, la atención se centra en si el Papa León XIV, el primer Papa estadounidense, optará por residir allí o seguirá la novedosa práctica de su predecesor.