Arzobispo de Minnesota pide oraciones tras tiroteo mortal de legisladores
El arzobispo Bernard A. Hebda pidió a los habitantes de Minnesota que se unan a él en oración por las víctimas de los ataques mortales del sábado contra legisladores estatales, incluida la ex presidenta de la Cámara de Representantes Melissa Hortman y su esposo, quienes fueron asesinados, y el senador John Hoffman y su esposa, quienes resultaron gravemente heridos.
“Pido a todas las personas de buena voluntad que se unan a mí en oración por el descanso de las almas de la presidenta emérita de la Cámara de Representantes de Minnesota, Melissa Hortman, y su esposo, junto con oraciones de recuperación para el senador John Hoffman y su esposa”, dijo el arzobispo Hebda de St. Paul y Minneapolis en una declaración del 14 de junio .
Según las autoridades, los ataques ocurrieron la madrugada del 14 de junio, cuando el sospechoso, Vance Boelter, se hizo pasar por un policía y disparó a Hoffman y a su esposa, para luego matar a Hortman y a su esposo en su domicilio. Una búsqueda de dos días culminó con la captura de Boelter en el condado de Sibley, según informó CatholicVote.
Hortman, quien tenía una larga trayectoria de servicio público, fue recordado por el arzobispo Hebda como un “servidor público honorable”.
“Aunque no estábamos de acuerdo en algunos temas, trabajamos en colaboración para encontrar puntos en común en otros en pos del bien común”, dijo.
El arzobispo señaló que los obispos católicos de Minnesota se reunían anualmente con ella para discutir preocupaciones legislativas clave.
También expresó su apoyo a Hoffman, quien sobrevivió al ataque después de someterse a múltiples cirugías.
“El senador Hoffman siempre es generoso con su tiempo, reuniéndose con los obispos cuando están en el Capitolio”, dijo el arzobispo Hebda. “Es un firme defensor de los más vulnerables, y Minnesota sigue necesitando su liderazgo”.
El obispo Robert Barron de la Diócesis de Winona-Rochester también ofreció un homenaje a los legisladores, recordando una visita reciente al Capitolio Estatal donde él y sus colegas obispos se reunieron con Hortman y Hoffman.
“El representante Hortman nos escuchó con gran inteligencia y atención”, escribió en X. “Y tuve una conversación maravillosa con el senador Hoffman, quien se graduó de la Universidad de Santa María en mi diócesis. Compartió su pasión por la Doctrina Social Católica”.
El obispo Barron condenó la violencia e instó a la unidad frente a la división.
“Dios sabe que somos una sociedad dividida, pero nuestras diferencias políticas nunca deben dar lugar a la violencia”, dijo, pidiendo oraciones por la recuperación de los Hoffman y el descanso de las almas de los Hortman.
El arzobispo Hebda también condenó la violencia política como una amenaza a la vida democrática.
“Es un error que nuestros representantes electos tengan que vivir con el temor a la violencia”, dijo. “No podemos mantener nuestra república representativa si nuestros legisladores temen la violencia contra ellos y sus familias”.
Concluyó animando a los habitantes de Minnesota a buscar fortaleza a través de la fe y la oración tras la tragedia.
“En estos tiempos de miedo e incertidumbre, necesitamos confiar aún más en nuestro Dios amoroso, y eso comienza con la oración, tanto privada como comunitaria”, dijo el arzobispo. “Que el Príncipe de la Paz nos aleje de esta violencia sin sentido”.