California reemplazó una estatua de un santo católico afuera del edificio del Capitolio por la de un nativo americano.
En julio de 2020, manifestantes derribaron una estatua de San Junípero Serra, un sacerdote católico y fraile franciscano a quien se le atribuye haber llevado el catolicismo al oeste estadounidense.
La nueva estatua es un homenaje al líder de la tribu Mikok, William J. Franklin, Sr., “en reconocimiento a las tribus nativas americanas cuyas tierras ancestrales son ahora terrenos del Capitolio estatal”.
El santo español del siglo XVIII fue el primero en ser canonizado en suelo estadounidense por el Papa Francisco en 2015 en el Santuario Nacional de la Inmaculada Concepción en Washington, DC. A Serra se le atribuye la fundación de nueve misiones en California.
Según un informe de AP News, el asambleísta James Ramos, un demócrata nativo americano de Highland “redactó un proyecto de ley para reemplazar la estatua en los terrenos del Capitolio con un monumento a los nativos americanos en el área de Sacramento”.
El gobernador de California, Gavin Newsom, dijo que la decisión “envía un poderoso mensaje desde los terrenos del Capitol Park en todo California, subrayando el compromiso del estado de tener en cuenta nuestro pasado y trabajar para promover una California para todos construida sobre nuestros valores de inclusión y equidad”.
El obispo de Sacramento, Jaime Soto, dijo el año pasado que la remoción de la estatua fue “un acto de vandalismo que hace poco para construir el futuro”, y agregó que la “santidad del santo como misionero no debe medirse por sus propios fracasos para detener la explotación o incluso por su propios defectos personales”.