El cardenal Joseph Zen, obispo emérito de Hong Kong y crítico abierto del Sínodo sobre la sinodalidad, ha publicado un nuevo libro titulado Una, Santa Católica y Apostólica: De la Iglesia de los Apóstoles a la Iglesia “sinodal” .
Publicada en italiano, la obra ofrece reflexiones sobre los fundamentos de la Iglesia y su crisis actual, según Samuele Pina, que escribe para una serie de Substack titulada Traditio.
En el libro, el cardenal Zen sostiene que el cristianismo no es simplemente una religión del libro, sino una fe profundamente arraigada en la Sagrada Tradición y el Magisterio. Escribió: “Jesús quería construir su Iglesia sobre los apóstoles, no sobre un libro. El Evangelio, escrito por inspiración del Espíritu Santo, debe interpretarse en la Sagrada Tradición viva”.
Destacó que para encontrar a Cristo es necesario abrazar la Sagrada Tradición, el Credo y el Magisterio, afirmando que sin estos elementos “no tengo la más mínima posibilidad de encontrar a Cristo”.
El cardenal de Hong Kong expresó su preocupación por los debates actuales sobre la sinodalidad, que, advierte, podrían socavar el fundamento apostólico de la Iglesia. Contrastó la estructura jerárquica de la Iglesia, arraigada en los apóstoles y sus sucesores, con lo que él llama “una sinodalidad mal definida, una ‘democracia de los bautizados’”.
Al cuestionar si todos los bautizados involucrados en las discusiones sinodales están espiritualmente preparados o profundamente arraigados en las Escrituras y la vida sacramental, advirtió que tal cambio “puede cambiar todo, la doctrina de la fe o la disciplina de la vida moral”.
El cardenal Zen también criticó a los líderes seculares y religiosos que priorizan el beneficio personal sobre el bien común. Basándose en las Escrituras, comparó a los líderes egoístas con los pastores descritos en Ezequiel, que explotan a sus rebaños en lugar de cuidarlos. Lamentó que tal comportamiento sea particularmente grave cuando lo comete la jerarquía de la Iglesia, que tiene la responsabilidad única de pastorear las almas con integridad.
En medio de sus críticas, el cardenal Zen ofreció una visión esperanzadora para la Iglesia, animando a los fieles a confiar en la providencia divina incluso en tiempos inciertos.
“Nuestro Buen Pastor conduce a todas las ovejas hacia un solo rebaño”, escribe el cardenal. Recordando a los fieles la misión de ser “luz para las naciones” e “instrumento de salvación hasta los confines de la tierra”, el cardenal instó a todos a permanecer firmes en la fe.
El cardenal Zen animó a los católicos a mantener la esperanza en medio de los sufrimientos actuales. “En la situación actual, en la que se nos han quitado tantas cosas”, escribió, “lo único que no se nos debe quitar es precisamente la esperanza”.
En su libro, el cardenal Zen también criticó el documento del Vaticano Fiducia Supplicans , que según él “inmediatamente causó gran sorpresa y luego generó mucha confusión”. El franco cardenal había criticado previamente el documento y pidió la renuncia del cardenal Víctor Fernández, prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, por sus errores.
El editor del nuevo libro del cardenal Zen, Aurelio Porfiri, describió al cardenal Zen como un pensador directo y exigente cuyo mensaje es especialmente relevante hoy. En una entrevista con el periodista Samuele Pina, Porfiri señaló que las ideas del cardenal brindan claridad y orientación muy necesarias para los católicos que navegan por la confusión en la Iglesia, diciendo: “Hoy vivimos en una época de gran confusión y crisis de fe en múltiples niveles, por lo que necesitamos guías que nos ayuden a no caer en el error”.