Ceremonia De Apertura De Los Juegos Olímpicos Decide Burlarse De La Fe Católica
La ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de París 2024 de esta semana contó con una exhibición de un grupo de personas vestidas con disfraces de “drag” que parecían burlarse de la Última Cena, lo que provocó protestas de católicos y cristianos no católicos en las redes sociales.
Las imágenes del evento inaugural muestran a una mujer que lleva un gran tocado con forma de corona de pie en el centro de una mesa larga, y a ambos lados de ella hay personas vestidas con disfraces de drag. Especialmente alarmante es que hay un niño presente en la mesa, señaló Collin Rugg en una publicación de X del 26 de julio.
Según el medio de comunicación Deadline: “Al recrear una pasarela para mostrar la moda por la que se conoce a París, un grupo de drag queens apareció en la pantalla posicionados de manera similar a cómo Jesús y sus doce apóstoles están representados en la pintura mural de Leonardo da Vinci”.
Católicos, cristianos no católicos y algunos no cristianos en X se han manifestado en contra de la exhibición, incluido un obispo católico, que ha pedido oraciones de reparación.
El presentador del podcast Clint Russell publicó en su cuenta X el 26 de julio un videoclip de la exhibición y escribió:
Hay 2.400 millones de cristianos en la Tierra y, aparentemente, los Juegos Olímpicos querían declarar en voz alta a todos ellos, desde el principio.
NO SON BIENVENIDAS
Dom Lucre publicó en su cuenta X más imágenes de la impactante exhibición, escribiendo: “El hombre azul que baila en la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos Mundiales de 2024 ahora está siendo colocado en el medio de la alfombra roja para representar el ‘plato’ en la recreación drag queen de la Última Cena de Jesús. ¿Cómo podría una nación católica permitir esto?”
Marion Maréchal, miembro del Parlamento Europeo, publicó en X el 26 de julio: “A todos los cristianos del mundo que están viendo la ceremonia #Paris2024 y se sintieron insultados por esta parodia drag queen de la Última Cena, sepan que no es Francia la que habla, sino una minoría de izquierda lista para cualquier provocación. #notinmyname”
El pateador de los Kansas City Chiefs, Harrison Butker, católico, publicó un clip de la exhibición en X, y encima del video publicó una cita de Gálatas: “’No os engañéis, Dios no puede ser burlado. Porque todo lo que el hombre sembrare, eso también segará. Porque el que siembra en su carne, de la carne también segará corrupción. Mas el que siembra en el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna.’ Gálatas 6:7-8″
El Dr. Taylor Marshall señaló algo muy cierto: “El emperador cristiano romano prohibió los Juegos Olímpicos en el año 393 d. C. porque eran homosexuales y paganos. ¡Hombres desnudos corriendo y luchando en honor a los 12 dioses que vivían en el monte Olimpo! La Revolución Francesa atea restableció los “Juegos Olímpicos” en 1796”.
El abogado y activista mexicano Jean Carlo Portillo también señaló algunas deficiencias en los discursos que santifican a Da Vinci, sin quitar que esta ceremonia se burló groseramente de los cristianos.
En un video publicado el 26 de julio en X, el obispo Robert Barron de la Diócesis de Winona-Rochester, Minnesota, condenó la exhibición como una “burla grosera y frívola” de la Última Cena.
Explicó que empezó a mirar la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos y luego vio “esa burlesca burla de la Última Cena”.
“Francia, evidentemente, ha creído que lo correcto, al intentar mostrar lo mejor de su cultura, es burlarse de este momento tan central del cristianismo, en el que Jesús, en su Última Cena, entrega su Cuerpo y su Sangre en anticipación de la cruz”, afirmó.
El obispo Barron comentó más tarde: “Esta sociedad profundamente secularista y posmoderna sabe quién es su enemigo, lo está nombrando y debemos creerles. Nos están diciendo quiénes son. Deberíamos creerles. Pero además, nosotros los cristianos, los católicos, no deberíamos ser tímidos. Deberíamos resistir. Deberíamos hacer oír nuestra voz”.
El obispo Donald Hying de la Diócesis de Madison, Wisconsin, en una publicación en X, pidió ayuno y oraciones en reparación por la blasfemia.
“En reparación por la blasfemia en París, ayunemos y oremos, renovemos nuestra devoción a la Eucaristía, al Sagrado Corazón y a la Virgen María. Que Jesús sea adorado y amado en todos los sagrarios del mundo. Gracias, Señor, por la Eucaristía y la Última Cena, por tu amor por nosotros”, escribió.
Varias oraciones de reparación se pueden encontrar aquí y aquí.
Una disculpa mediocre
Los católicos alrededor del mundo hicieron sentir sus voces ante esta falta de respeto. Tanta fue la indignación colectiva que el “promotor de justicia” de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Mons. Charles Scicluna, expresó su indignación al embajador de Francia en Malta.
Lo que siguió, por supuesto, fue la disculpa del comité olímpico. La portavoz de París 2024, Anne Descamps, dijo en una conferencia de prensa: “Claramente no había intención de faltarle el respeto a ningún grupo religioso. (La ceremonia de apertura) intentó celebrar la tolerancia comunitaria. Creemos que esta ambición se ha logrado. Realmente lamentamos que la gente se haya sentido ofendida”.
Como es natural, estas disculpas le han parecido insuficientes a muchísimos católicos, inclusive a algunos obispos como Robert Barron, quien señaló que “las disculpas expresadas por el comité olímpico no son suficientemente buenas” en una entrevista brindada a Fox News.
