Mientras celebra su octogésimo cumpleaños este mes, la cofundadora de American Life League (ALL), Judie Brown, compartió sobre su vida, sus encuentros con “presidentes y papas”, su trabajo provida y el apoyo crucial que ha recibido a través de su fe católica y su familia.
“Como cofundador de la American Life League, fundada hace 45 años, Brown ha influido en presidentes y papas, ha criticado a Planned Parenthood y a la NAACP, y continúa dando forma al movimiento provida incluso en la era posterior a Roe”, según un artículo publicado por Christian News Wire (CNW).
En una entrevista obtenida por TC Public Relations y publicada por CNW, Brown compartió sobre “su logro más significativo en la vida”.
“Me pidieron, y todavía nos piden, que nos casemos con el hombre más extraordinario del mundo, Paul A. Brown”, dijo. “Sin él no habría hijos ni nietos, ni American Life League, pero sobre todo, no habría oportunidad de presenciar los milagros de la renovación y práctica de su fe. Dios nos dio a mí y a toda nuestra familia un regalo increíble cuando le dije sí a Paul”.
Brown ha sido una defensora provida durante décadas y enfatizó que su fe católica ha sido crucial en este trabajo.
“He estado a la vanguardia de la defensa de las mujeres que aún no han nacido, de sus madres y de sus familias extendidas”, dijo Brown. “He buscado la ayuda de la Santísima Madre para hacer todo esto durante años. Como nos ha enseñado Nuestra Señora, la humildad y la oración son el centro de nuestra batalla”.
El artículo de CNW señaló que Brown ha trabajado extensamente a favor de las leyes provida y ha “ejercido influencia sobre líderes políticos y religiosos, y obtenido el apoyo de íconos culturales tan diversos como el renombrado senador conservador Jesse Helms y el ex abortista Dr. Bernard Nathanson. “
Brown también apareció en programas de televisión como Oprah Winfrey y Phil Donahue, en los que “compartió públicamente su conocimiento provida… con cientos de miles de espectadores”, señaló CWN.
Brown también era amigo del presidente Ronald Reagan, y el artículo de CNW informó que esta amistad “afirmó las opiniones provida sin disculpas [de Reagan]”.
También sirvió en la Academia Pontificia para la Vida bajo el Papa Juan Pablo II y el Papa Benedicto XVI, abogando por el carácter sagrado de la vida humana.