Los atletas masculinos que dicen ser mujeres se enfrentan a un “lenguaje problemático” como “biológicamente masculino”, escribió el Comité Olímpico Internacional (COI) en un nuevo documento de 33 páginas para los medios que cubren los Juegos Olímpicos de París este verano.
El COI afirmó que su documento “Pautas de representación”, ahora en su tercera edición, está “en consonancia con los objetivos de igualdad e inclusión de género del COI para el período 2021-2024”. El comité añadió que las directrices buscan “‘prácticas de representación justa y de igualdad de género en todas las formas de comunicación’ en todo el COI, en los Juegos Olímpicos y en todo el Movimiento Olímpico”.
La sección de las pautas que trata sobre los atletas “transgénero” señaló el “lenguaje problemático” cuando los medios cubren a los “atletas con variaciones de sexo” e instruyó a los periodistas a “evitar” términos como:
… “nacido hombre”, “nacido mujer”, “biológicamente hombre”, “biológicamente mujer”, “genéticamente hombre”, “genéticamente mujer”, “hombre a mujer (MtF)”, “mujer a hombre” ( FtM).
“El uso de frases como las anteriores puede ser deshumanizante e inexacto cuando se usan para describir a deportistas transgénero y atletas con variaciones de sexo”, afirmó el COI. “La categoría de sexo de una persona no se asigna basándose únicamente en la genética y aspectos de la biología de una persona pueden alterarse cuando busca atención médica que afirme su género”.
Los términos recomendados para usar, en cambio, incluyen: “niña/niño, mujer/hombre, niña/niño transgénero, mujer/hombre transgénero, persona transgénero”, escribió el COI.
“Siempre es preferible enfatizar el género real de una persona en lugar de poner potencialmente en duda su identidad haciendo referencia a la categoría de sexo que estaba registrada en su certificado de nacimiento original”, instruyó el comité. “Si hay una razón clara para referirse a la categoría que se le asignó a una persona al nacer, los términos a utilizar son: ‘mujer asignada al nacer’, ‘hombre asignado al nacer’, o ‘mujer designada al nacer’, ‘hombre designado al nacer.'”
El documento del COI también capacita a los medios para que utilicen “el nombre, los pronombres y/o los términos correctos, así como las imágenes apropiadas” en interacciones con atletas que afirman tener un género que es inconsistente con su verdadero sexo.
“Si es necesario, pregúntele a la persona qué pronombres usa y cómo se identifica/describe a sí misma, para respetar su identificación autodeterminada”, aconsejó el COI, y agregó: “[E]vite los nombres muertos (refiriéndose al nombre de una persona por el cual anteriormente se conocían pero ya no se usan) o mal género (refiriéndose a una persona, especialmente una persona transgénero, que usa un género incorrecto)”.
Yiannis Exarchos, director ejecutivo de Olympic Broadcasting Services, dijo que su equipo utilizará las directrices actualizadas como “nuestra Biblia”, informó The Telegraph.
Pero la campeona de Wimbledon y defensora de los deportes femeninos, Martina Navratilova, acusó al COI de librar una “versión de 1984 de la guerra contra las mujeres”, según The Telegraph.
“El COI ha sido capturado”, añadió Navratilova. “Borrado total”.
El informe detalla el cronograma de la capitulación del COI ante la agenda radical LGBT:
La vacilación del COI respecto de los atletas trans está detrás de gran parte de la discordia y la confusión que ha envuelto al deporte sobre este tema. En 2004, aprobó una política para que los transexuales postoperados participaran en eventos femeninos, insistiendo en que la situación sería “extremadamente rara”. En 2015, había comenzado a recomendar la supresión de testosterona por debajo de 10 nanomoles por litro como solución, a pesar de que el rango promedio para las mujeres estaba entre 0,5 y 2,4.
Luego, en los Juegos Olímpicos de Tokio de 2021, el director médico del COI, el Dr. Richard Budgett, proclamó: “Todo el mundo está de acuerdo en que las mujeres trans son mujeres”.
“Excepto que muchas mujeres no estuvieron de acuerdo en nada de eso”, señaló The Telegraph, “y la francesa Marion Clignet presentó una encuesta a la UCI el año pasado que mostraba que el 92 por ciento de las ciclistas estaban a favor de prohibir la participación de hombres biológicos en sus eventos”.
Otro ex deportista olímpico indignado por las directrices del COI es la ciclista estadounidense Inga Thompson, quien calificó al COI como el “movimiento misógino supremo”.
Acusó a los medios de comunicación del COI de haberse “dejado comprar, porque en el fondo nunca quisieron que las mujeres practicaran deporte”.
La ciclista de montaña canadiense Alison Sydor también se ha pronunciado en contra del COI, señalando que el comité citó al grupo activista radical LGBT GLAAD como autoridad principal para sus directrices.
Al observar la nueva camiseta promocional de GLAAD que dice “No TERF” [“feministas radicales transexclusivas”], Sydor comentó: “El COI sabe cómo elegir un socio para sermonear a todos sobre el lenguaje deshumanizante”.
Steve McConkey, presidente del ministerio mundial de deportes 4 WINDS USA, también señaló que las acciones del COI muestran desprecio por los cristianos.
“Impulsan agendas radicales y han permitido que los Juegos Olímpicos sean en países que persiguen a los cristianos, además trabajan con las Naciones Unidas”, destacó. “Las Naciones Unidas les concedieron el estatus de observadores para implementar los Objetivos de Desarrollo del Milenio de la ONU. Los atletas individuales deben concentrarse en sus eventos y los cristianos deben compartir a Cristo a pesar de los esfuerzos del Comité Olímpico”.