La representante de Carolina del Sur, Nancy Mace, ha encendido un intenso debate en Washington tras proponer una resolución que prohíbe a personas transgénero usar baños designados para el sexo opuesto en el Capitolio de Estados Unidos.
Mace, una sobreviviente de violación y abuso sexual, defendió su posición afirmando que la medida busca proteger la seguridad y privacidad de las mujeres.
La congresista progresista Alexandria Ocasio-Cortez (AOC) criticó ferozmente la propuesta, argumentando que “pone en peligro a las mujeres y las niñas”. Según AOC, la resolución generaría sospechas y fomentaría un ambiente de vigilancia y discriminación hacia las personas trans.
“Lo que están haciendo Nancy Mace y el presidente Johnson pone en peligro a todas las mujeres y niñas”, afirmó AOC, aludiendo a la falta de un plan claro para implementar la medida. Incluso acusó a Mace de fomentar un ambiente donde se podría “revisar” la identidad de género de las mujeres, algo que calificó de “repugnante”.
Mace, por su parte, calificó estas declaraciones de “hipócritas y engañosas”, argumentando que los demócratas no tienen un historial real de protección hacia las mujeres. “Es realmente el colmo de la hipocresía. Sus políticas sólo pondrán en peligro a más mujeres y niñas”, afirmó la congresista en una entrevista.
La legislación propuesta estipula que los baños del Capitolio sean utilizados de acuerdo con el sexo biológico de cada persona, asignando al sargento de armas de la Cámara la responsabilidad de hacer cumplir la norma.
“Es ridículo que las mujeres que han sido víctimas de abuso tengan que desvestirse o usar un baño junto a un hombre”, dijo Mace, subrayando su experiencia personal como sobreviviente de violencia sexual para justificar la urgencia de la medida.
El debate adquiere un nuevo matiz con la llegada en enero de Sarah McBride, la primera legisladora abiertamente transgénero en el Congreso, lo que ha avivado la controversia en torno a los derechos LGBTQ+ y los espacios designados según el género.
Desde que presentó la resolución, Nancy Mace ha enfrentado amenazas y acoso público. “Es triste y sorprendente que en 2024 tenga que explicar a la izquierda radical que las mujeres no deberían ser obligadas a desvestirse delante de los hombres”, lamentó.
La congresista no muestra signos de retroceder ante las críticas y asegura que seguirá luchando por la privacidad y seguridad de las mujeres en espacios públicos.
La confrontación entre Mace y AOC pone en evidencia dos visiones opuestas sobre los derechos de las mujeres y la comunidad trans. Para Mace, el foco está en preservar espacios seguros para mujeres cisgénero, mientras que para AOC, esta medida representa una amenaza y discriminación hacia las personas trans.
Este debate no solo revela divisiones ideológicas, sino que también subraya el desafío de equilibrar derechos y libertades en un Congreso cada vez más polarizado. ¿Es esta medida un acto de protección o una forma de exclusión? El tiempo y la implementación de la resolución dirán.