Los demócratas del Senado de Estados Unidos bloquearon el jueves la Ley de Protección de la Elegibilidad de los Votantes Estadounidenses (SAVE), que habría impedido que los inmigrantes ilegales votaran en las elecciones del país.
El senador Mike Lee, republicano por Utah, escribió en X (anteriormente Twitter) el jueves por la tarde que había convocado a votación del pleno el proyecto de ley “para buscar su aprobación inmediata y garantizar que solo los ciudadanos estadounidenses puedan votar en noviembre”.
Los demócratas del Senado, que tienen una mayoría muy estrecha en la cámara, se opusieron.
“No quieren impedir que los inmigrantes ilegales y los no ciudadanos voten en las elecciones estadounidenses”, escribió Lee.
“Un ciudadano, un voto”, había dicho Lee durante un discurso pronunciado el jueves en el Senado. “Hoy, este principio fundamental está bajo ataque”.
“Está bajo ataque porque el presidente Biden se niega a hacer cumplir la ley”, añadió. “Ahora nos enfrentamos a una amenaza directa a todo nuestro sistema electoral”.
El día anterior, la Cámara de Representantes de Estados Unidos, controlada por los republicanos, aprobó la Ley SAVE con una votación de 221 a 198.
Cinco demócratas de la Cámara de Representantes se unieron a todos los republicanos votantes en apoyo del proyecto de ley: los representantes Henry Cuellar, demócrata de Texas, Don Davis, demócrata de Carolina del Norte, Marie Gluesenkamp Pérez, demócrata de Washington, Jared Golden, demócrata de Maine, y Vicente González, demócrata de Texas.
Los cinco legisladores se enfrentan a reñidas contiendas de reelección en noviembre. Golden y Gluesenkamp Pérez representan escaños que el expresidente Donald Trump ganó en 2020.
El representante estadounidense Chip Roy, republicano por Texas, presentó por primera vez la Ley SAVE en mayo. Posteriormente, la administración Biden se opuso al proyecto de ley que habría requerido que las personas presenten una prueba de ciudadanía antes de votar en las próximas elecciones.
El mes pasado, la Dra. Susan Berry de CatholicVote informó que los republicanos instaron a apoyar la medida “a raíz de un informe impactante del New York Post que reveló que miles de no ciudadanos están obteniendo formularios de registro de votantes en agencias de asistencia social que no exigen prueba de ciudadanía”.