Demócratas por la Vida en Colorado presentó una estrategia para ayudar socialmente a las mujeres embarazadas a la luz del número desproporcionado de abortos tardíos luego de la protección del aborto como un derecho en Colorado en 2022.
“Ya sea que sea provida o proelección, debería alarmarse por el rápido aumento de la tasa de abortos en Colorado”, escribieron Kathleen Houston y Thomas J. Perille, MD, miembros de Demócratas por la Vida de Colorado, en un artículo de opinión para la Gaceta de Denver:
El hecho de que cientos de mujeres sanas de Colorado elijan cada año someterse a abortos posteriores a la viabilidad de sus fetos sanos es una crítica a nuestra red de seguridad y sistemas de atención médica…
Los centros de recursos para el embarazo pueden brindar un apoyo importante a estas mujeres vulnerables al aborto, pero las políticas y los programas públicos deberían reflejar mejor nuestros valores. Las mujeres nunca deberían sentirse obligadas a abortar debido a desafíos financieros y sociales.
El artículo señaló que ha habido un aumento del 19% en los abortos en Colorado en los últimos dos años, según el Departamento de Salud Pública y Medio Ambiente de Colorado.
“Existe evidencia de que dos tercios de las mujeres sienten que su aborto fue no deseado, forzado o inconsistente de alguna otra manera con sus valores y preferencias”, continuaron Houston y Perille. “Esto significa que si bien podríamos estar simplificando el acceso al aborto en nuestro estado, no estamos haciendo nada para abordar los factores sociales y financieros que impulsan la decisión de abortar. Una ‘elección’ sólo es una elección si las mujeres sienten que tienen más de una opción”.
Los autores argumentaron además que existen razones de salud pública por las que la gente debería preocuparse por la creciente tasa de abortos. Colorado tiene un número desproporcionadamente alto de abortos tardíos, que son menos seguros.
“Aunque el aborto en el primer trimestre es relativamente seguro en comparación con otros procedimientos ambulatorios, el riesgo de morir a causa de un aborto aumenta un 38% por cada semana adicional de gestación después de ocho semanas”, señalaron Houston y Perille. “Y en Colorado tenemos un número desproporcionado de abortos tardíos: 10,5% después del primer trimestre y 3,4% (487) después de 21 semanas, que es el límite de viabilidad fetal. Esto supone un riesgo muy alto para la salud y la vida de las mujeres”.
Houston y Perille sostienen que para lograr la “equidad basada en el género”, los habitantes de Colorado deberían hacer esfuerzos para “minimizar el impacto que esas diferencias [biológicas] tienen” en las mujeres en sus carreras y su salud física. Los dos hicieron referencia a la Proposición 118, que los votantes de Colorado respaldaron en 2020. La propuesta establecía licencias familiares y de maternidad remuneradas.
“Éste es un ejemplo prototípico de este enfoque alternativo. Pero se puede hacer mucho más”, escribieron Houston y Perille.
Los dos promovieron además hacer que el parto sea “gratuito” y aumentar la atención prenatal y posparto, entre otras cosas, para abordar la cuestión social.