El gobernador de Florida, Ron DeSantis, ordenó al estado que tome medidas enérgicas contra los grupos de estudiantes universitarios que mostraron su apoyo a los ataques terroristas de la Operación Inundación Al-Aqsa de Hamas contra Israel hace dos semanas.
El gobernador ordenó a Ray Rodrigues, rector del Sistema Universitario Estatal de Florida, que envíe avisos a la Universidad de Florida y a la Universidad del Sur de Florida notificándoles que deben desactivar sus capítulos de Estudiantes por la Justicia en Palestina (SJP) porque supuestamente violaron Leyes de Florida sobre terrorismo.
“Durante una festividad judía sagrada, la reconocida organización terrorista Hamás lanzó un ataque no provocado contra Israel; entre los muertos había bebés, mujeres y ancianos”, dijo Rodrigues en una carta a los presidentes de las universidades públicas de Florida. “Hasta la fecha, aproximadamente 1.400 israelíes han sido asesinados, entre ellos 31 ciudadanos estadounidenses. El Gobernador DeSantis, nuestro Sistema Universitario Estatal y el Sistema Universitario de Florida han condenado estos ataques”.
En respuesta a los ataques terroristas islámicos palestinos, “Estudiantes Nacionales por la Justicia en Palestina (JEP Nacional) publicó un ‘juego de herramientas’ que se refiere a la Operación Inundación de Al-Aqsa como ‘la resistencia’ y declara inequívocamente: ‘Los estudiantes palestinos en el exilio son PARTE de este movimiento, no en solidaridad con este movimiento’”, decía la carta.
La carta señalaba que, según la ley de Florida, es un delito grave “proporcionar apoyo material a sabiendas”. . . a una organización terrorista extranjera designada. . .” Hamás está designado por Estados Unidos como organización terrorista extranjera.
“Aquí, el SJP Nacional ha identificado afirmativamente que es parte de la Operación Inundación de Al-Aqsa, un ataque dirigido por terroristas”, continuaba la carta, y luego agrega: “Basado en el apoyo al terrorismo del SJP Nacional, en consulta con el Gobernador DeSantis, el estudiante Los capítulos deben estar desactivados”.
La carta concluía diciendo que Florida continuará monitoreando los eventos en los campus universitarios y “utilizará todas las herramientas a nuestra disposición para reprimir las manifestaciones en los campus que van más allá del discurso protegido por la Primera Enmienda y llegan al apoyo dañino a grupos terroristas”.