En un giro inusual de los acontecimientos antes del cónclave papal de 2025, las edades oficiales de dos cardenales africanos – John Njue de Kenia y Philippe Ouédraogo de Burkina Faso – fueron revisadas recientemente en el anuario oficial del Vaticano, haciéndolos a ambos elegibles para participar en la elección del próximo Papa.
La inusual “actualización” administrativa de dos cardenales que originalmente no tenían derecho a voto y pasaron a ser votantes atrajo la atención de la prensa italiana el sábado 3 de mayo. Durante la conferencia de prensa en la oficina de prensa del Vaticano, un corresponsal de la agencia de noticias italiana ANSA preguntó sobre el motivo del repentino cambio.
Según la ley eclesiástica, solo los cardenales que no hayan cumplido 80 años el día de la vacante del papado pueden votar en el cónclave. Anteriormente, se creía que los cardenales Njue y Ouédraogo superaban el límite de edad, lo que los habría excluido del proceso electoral. Sin embargo, tras la revisión y presentación de nueva documentación, se corrigieron sus fechas de nacimiento, lo que los rejuveneció y les devolvió el derecho a entrar en la Capilla Sixtina como electores.
“No todos los países gozan de la misma calidad de registros civiles”, explicó Matteo Bruni, director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede. Señaló que las declaraciones iniciales sobre las fechas de nacimiento de los cardenales “se han modificado con un documento válido”. Este cambio significa que, a diferencia de los registros anteriores, ambos cardenales ahora tienen oficialmente menos de 80 años, edad que ambos alcanzarán más adelante este año.
A pesar de la corrección, el cardenal Njue no viajará a Roma por motivos de salud, dejando al cardenal francófono Ouédraogo, emérito de Uagadugú (Burkina Faso), como el único de los dos que se espera que participe en el cónclave.
Con 18 cardenales electores africanos, la voz del continente es más prominente que nunca en la selección del próximo Papa.