La procesión del Señor de los Milagros es una de las muestras públicas de fe católica más grandes del mundo. Sin duda es la que más dura y su devoción es sello inequívoco de tradición en el país sudamericano. Es tan grande la procesión que llega hasta Nueva York y Roma. Aquí les contamos más sobre el Cristo Moreno del Perú y les damos las fechas y rutas de los recorridos.
En octubre, Lima mantiene su cielo gris, pero lo contrasta con el morado de sus calles y la vestimenta de sus ciudadanos. La famosa y siempre popular procesión del Señor de los Milagros, el evento religioso más grande del año en nuestro país, se suele celebrar alrededor de tradiciones y una fe que mueve montañas.
En el siglo XVII, el catolicismo ya estaba bastante difundido en el Perú colonial. En este siglo la población de esclavos africanos se concentra en los lados periféricos de la ciudad de Lima, como el barrio de Pachacamilla (donde ahora se ubica la iglesia de Las Nazarenas). Es aquí donde un esclavo negro, natural del país de Angola, con el nombre de Benito o Pedro Dalcón, pintó una imagen de Jesucristo crucificado en un templo improvisado. Cabe resaltar que, aproximadamente en 1650, los esclavos de este barrio habían formado una cofradía para expresar su fervor religioso y que Dalcón no era un artista ni tampoco poseía conocimientos sobre pintura. Fue su devoción la que lo llevó a pintar la imagen.
En 1655 un terremoto sacudió la ciudad y causó muertos, heridos y damnificados, además de dejar en ruinas muchas construcciones. La cofradía estaba construida de adobe, por lo que todas sus paredes cayeron, pero misteriosamente la pared en donde estaba pintada la santa imagen resultó intacta, sin ningún signo de daño material, algo que fue y continúa siendo considerado milagroso. El fervor religioso creció después de este inimaginable suceso. Los fieles se acercaban a rendir homenaje a la imagen y el gran interés sustituyó incluso otras celebraciones como el Corpus Christi y la Virgen del Carmen.
Sin embargo, las reuniones de los esclavos fieles fueron mal vistas por algunos religiosos locales, como el párroco de la iglesia de San Sebastián. Luego de diversas coordinaciones, se dictaminó que el Jesucristo en la cruz fuera borrado. Sin embargo, se cuenta que en las tres ocasiones que se trató de borrar, los encargados terminaban impactados y hasta asustados por la milagrosa imagen. Finalmente, se decidió dejar la imagen y se construyó una capilla en su honor. Después del gran terremoto, la imagen sobrevivió intacta incluso después de una serie de fuertes temblores que llegaron en los años posteriores. Esto hizo que la fe alrededor de ella se incrementara y que el Cristo de Pachacamilla se convirtiera en el protector de Lima. Uno de estos temblores hizo que Sebastián Antuñano, un gran impulsor de la fe al Señor de los Milagros, ordenara hacer una copia al óleo de la imagen para que saliera en procesión por las calles de Pachacamilla. La tradición sigue en pie hasta hoy, así como la inquebrantable fe de sus fieles.
Es tradición que los fieles del Señor de los Milagros se vistan con un hábito morado en octubre, como signo de devoción a la santa imagen. Pero ¿cómo empezó esta costumbre? Se dice que la madre Antonia Lucía del Espíritu Santo llegó de Ecuador a Lima y fundó el Beaterio de Nazarenas en el Callao, cuyo hábito era morado, propio de la túnica nazarena, en honor a Jesús Nazareno (es decir, el Cristo con la cruz a cuestas). Hasta ese entonces, el color morado no tenía relación con el Señor de los Milagros. No fue hasta que la madre Antonia tuvo un espacio al costado de la capilla del Cristo de Pachacamilla cuando se empezó a relacionar el hábito de las beatas con el Cristo moreno.
Las alfombras de flores en las procesiones del Señor de los Milagros son una costumbre casi artística que se cumple cada octubre. Estas alfombras, que indican por dónde pasará el anda con la imagen, son una expresión hecha a mano por cientos de fervientes católicos que quieren hacer presente su fe, así como clubes de madres, comedores populares, entre otras organizaciones e instituciones privadas o del Estado.
Las velas características de estas fechas también se han vuelto parte de la costumbre de los feligreses. Son cirios labrados artísticamente con los colores propios del Señor de los Milagros y se usan para acompañar a la imagen durante la procesión. Luego son entregados como ofrenda en la iglesia de las Nazarenas. ¡Hay de todos los tamaños! Pueden ser muy pequeños hasta enormes, de varios kilos de peso.
Como en cualquier celebración peruana, no puede faltar la comida típica. En el mes morado el turrón de doña Pepa es un infaltable postre en la mesa de los peruanos. El turrón se prepara con palitos de harina y manteca que se cubren de miel e innumerables grajeas de colores. Según cuenta la historia, una esclava morena de nombre Josefa Marmanillo, o doña Pepa, se curó de una parálisis en sus brazos tras rezarle al Señor de los Milagros. En agradecimiento, creó uno de los postres más sabrosos del Perú. Existen de muchas presentaciones, pero el sabor clásico y tradicional permanece igual.
Otro platillo que no puede faltar son los picarones, que nos dejan chupándonos los dedos de lo deliciosos que son. En el siglo XVII se comenzó a ofrecer este manjar en las procesiones del Cristo Moreno y se convirtió en una tradición que los fieles disfrutan mientras acompañan a la santa imagen por las calles de Lima. La receta no ha variado a lo largo de los años. Se prepara con harina de trigo mezclada con zapallo y camote, que se sumerge en aceite hirviendo hasta lograr su característica textura crocante. Se acompaña con miel de chancaca.
La Hermandad del Señor de los Milagros de Nazarenas informó que este 2023 el recorrido del Cristo Moreno por las calles del Centro de Lima inicia el sábado 7 de octubre. Los demás días que los fieles podrás acompañar al Señor de los Milagros son el 18, 19, 28 de octubre y el 1 de noviembre.
La salida del Cristo Moreno será desde el Monasterio de Las Nazarenas al mediodía, comenzará el recorrido en la avenida Tacna, irá por la avenida Emancipación, el jirón Chancay, Callao y retornará a Tacna para regresar a la iglesia Las Nazarenas, ya por la noche.
La imagen del Señor de los Milagros saldrá a las 6 de la mañana desde la iglesia Nazarenas hacia los jirones Ica, De la Unión, Carabaya, Ucayali hasta ingresar por la avenida Abancay. Seguirá por los jirones Junín, Huanta, Miro Quesada hasta llegar a la iglesia Del Carmen, aproximadamente a las 4:00 de la mañana, donde se guardará la imagen.
El anda del Cristo Morado inicia su recorrido en la iglesia Del Carmen desde las 6 de la mañana por jirón Huánuco, irá por Puno y seguirá por las avenidas Grau, Nicolás de Piérola, Miguel Aljovín, jirón Carabaya, regresa por Nicolás de Piérola, sube por Tacna y a eso de las 4 de la mañana se guardará a la iglesia Las Nazarenas.
La imagen sale a las 6 de la mañana de la iglesia Las Nazarenas y avanzará por las avenidas Tacna, Garcilazo de la Vega, Bolivia, para continuar por los jirones General Valera, Pomabamba, la avenida Alfonso Ugarte, jirón Cañete, la avenida Nicolás de Piérola y regresa a Tacna. Retornará a Las Nazarenas a las 4 de la mañana.
El último recorrido. Al mediodía la imagen del Señor de los Milagros saldrá de Las Nazarenas y avanzará por la avenida Tacna, el jirón Callao, jirón Chancay y la avenida Emancipación. Luego se guardará en la iglesia hasta el 2024.
—
Foto: carlos-ruiz-huaman/unsplash