La gobernadora de Iowa, Kim Reynolds, firmó una ley el 2 de abril que prohíbe que la acción del gobierno “cargue sustancialmente” o infrinja los derechos de libertad religiosa de los habitantes de Iowa sin razón suficiente.
“La acción del Estado no gravará sustancialmente el ejercicio de la religión de una persona, incluso si la carga resulta de una regla de aplicabilidad general, a menos que el gobierno demuestre que aplicar la carga al ejercicio de la religión de esa persona responde a un interés gubernamental imperioso y es la medios menos restrictivos para promover ese interés gubernamental imperioso”, afirma la ley, conocida como Ley de Restauración de la Libertad Religiosa.
La ley además permite a los habitantes de Iowa acudir a los tribunales si sienten que sus derechos de libertad religiosa han sido violados por cualquier acción estatal. El tribunal aún determinará la situación legal de la denuncia con base en las leyes estatales y federales.
“Hace treinta años, la Ley de Restauración de la Libertad Religiosa fue aprobada casi por unanimidad a nivel federal”, afirmó Reynolds en un comunicado de prensa. “Desde entonces, los derechos religiosos han sido cada vez más atacados. Hoy, Iowa promulga una ley para proteger estos derechos inalienables, tal como lo han hecho otros veintiséis estados, defendiendo los ideales que son la base misma de nuestro país”.
El Des Moines Register informó que la ley fue apoyada por los republicanos, pero que los demócratas y los defensores de LGBT sintieron que el proyecto de ley permitiría a las personas “convertir en arma” sus creencias religiosas y discriminar a las personas que se identifican como LGBT.
“No se puede negar: este proyecto de ley tiene como objetivo discriminar a los habitantes de Iowa LGBTQ+, a los padres solteros, a las personas que necesitan servicios de atención de salud reproductiva y muchos más”, dijo en un comunicado Courtney Reyes, directora ejecutiva del grupo de defensa LGBTQ One Iowa Action.
Según Iowa Public Radio, el bufete de abogados cristiano Alliance Defending Freedom (ADF) elogió a Reynolds por firmar la ley.
“Esta ley proporciona una prueba de equilibrio sensata que los tribunales pueden utilizar al revisar las políticas gubernamentales que infringen los derechos de libertad religiosa de los habitantes de Iowa”, dijo el abogado de la ADF, Greg Chafuen, según la Radio Pública de Iowa.
“La ley no determina quién ganará cada desacuerdo, pero sí garantiza que todos los habitantes de Iowa, independientemente de su credo religioso o poder político, reciban una audiencia justa cuando la acción del gobierno obligue a una persona a violar sus creencias religiosas”, añadió.