La administración Biden está planeando implementar un programa financiado por los contribuyentes que otorgará tarjetas de identificación emitidas por el gobierno a miles de inmigrantes ilegales que cruzan la frontera sur.
El programa de tarjeta de expediente seguro del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de EE. UU. había estado en proceso desde al menos 2022.
FOX News informó el jueves por la tarde que “se espera que el programa piloto comience este verano con la distribución de aproximadamente 10.000 tarjetas”.
“Si bien [ICE] destacó que los planes son ‘previos a la toma de decisiones’ y aún están sujetos a cambios, se espera que las tarjetas se emitan en tres o cuatro ubicaciones en los EE. UU.”, agregó FOX. “Una fuente familiarizada con el programa le dijo a Fox que Houston y Atlanta eran dos ubicaciones potenciales”.
Según FOX, ICE afirma que uno de los propósitos del programa es “modernizar la documentación proporcionada a algunos no ciudadanos”.
ICE es una agencia del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
El DHS está actualmente dirigido por el controvertido secretario Alejandro Mayorkas, a quien una gran mayoría de estadounidenses considera responsable de la crisis actual en la frontera entre Estados Unidos y México.
FOX informó anteriormente sobre el programa de identificación en septiembre de 2023, poco después de obtener imágenes filtradas de las tarjetas ICE Secure Docket planeadas.
Las imágenes “muestran una tarjeta con espacio para una fotografía, un código QR e información de identificación y detalles de seguridad, así como el logo de ICE en la esquina superior izquierda”, informó FOX en ese momento.
“ICE anunció previamente que la identificación tendrá una fotografía, identificadores biográficos y características de seguridad ‘de vanguardia’”, continúa el informe de FOX de septiembre de 2023:
La agencia dijo entonces que el programa aún estaba en desarrollo y que se consideraría una mayor expansión en espera del resultado del piloto. ICE ya ha completado una notificación piloto requerida al Congreso.
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La tarjeta podría usarse para registrarse y programar reuniones de informes con ICE. La agencia espera que pueda usarse en el campo para verificar fácilmente la identidad de un extranjero y ver si es deportable.
Además, FOX señaló en ese momento que este “programa ha alarmado a los conservadores, que lo ven como parte de una agenda para acoger, en lugar de expulsar, a quienes se encuentran en el país ilegalmente”.
Esta semana, el presidente del Centro Nacional de Inmigración para la Aplicación de la Ley (NICE), RJ Hauman, dijo a FOX: “Justo a tiempo para las elecciones, la administración Biden está legitimando silenciosamente una invasión de nuestra nación sancionada por el gobierno”.
“Proporcionar identificación a los extranjeros ilegales sin duda conducirá a la obtención de otros documentos, beneficios y derechos, o creará una identidad completamente nueva”, continuó Hauman. “Después de todo, la mayoría de los que cruzan la frontera no tienen información de identificación en su poder. Entonces, ¿cómo sabemos quiénes son?
Hauman es miembro visitante de The Heritage Foundation.
La noticia del lanzamiento del controvertido programa de identificación se produce cuando los legisladores están haciendo sonar la alarma sobre la actual afluencia sin precedentes de inmigrantes.
El miércoles, la Cámara de Representantes, controlada por los republicanos, aprobó por estrecho margen un proyecto de ley que busca impedir que los no ciudadanos tengan en cuenta los totales de población durante las decisiones de redistribución de distritos del Congreso.
La Ley de Igualdad de Representación fue aprobada por un margen de 206-202. La legislación de la Cámara fue patrocinada por el representante Chuck Edwards, republicano por Carolina del Norte, y el representante Warren Davidson, republicano por Ohio.
Rob Bluey y Fred Lucas del Daily Signal escribieron:
Con millones de extranjeros ilegales residiendo en Estados Unidos (un problema exacerbado por las políticas fronterizas de la administración Biden), la legislación tiene como objetivo proteger el poder electoral y la representación en el Congreso de los estadounidenses garantizando que los ciudadanos extranjeros no sean contados en el censo.