Un grupo activista cristiano de izquierda hizo circular la semana pasada una petición pidiendo la renuncia del juez asociado de la Corte Suprema Samuel Alito, un católico.
Hasta el lunes por la tarde, la petición de Faithful America había reunido poco menos de 15.000 firmas.
“Estimado juez Samuel Alito”, comienza. “Como miembros de la organización cristiana Faithful America, estamos profundamente decepcionados por sus recientes comentarios… coincidiendo en que Estados Unidos debería pasar a un lugar de ‘santidad’”.
Como informó Newsweek, Alito hizo estos comentarios en “de acuerdo” con la “directora de documentales liberal Lauren Windsor” encubierta en la cena anual de la Sociedad Histórica de la Corte Suprema a principios de este mes.
Según Newsweek, Windsor “se hacía pasar por conservador mientras asistía” a la cena.
En su descripción de la petición, Faithful America también discrepó con la afirmación de Alito – hecha cuando pensaba que estaba “de acuerdo” con Windsor – de que “la batalla por Estados Unidos ‘no puede verse comprometida’ y que ‘un lado o el otro está va a ganar.'”
Faithful America no reconoció que Alito también le había dicho a Windsor, a quien aparentemente tomó por un activista conservador, que la Corte Suprema no estaba en condiciones de imponer valores conservadores al país y que los jueces están debidamente limitados por su papel constitucional.
“Este hombre está lejos de ser imparcial”, opinó Faithful America.
“Estos comentarios distorsionan el cristianismo, violan la separación de la Iglesia y el Estado y parecen respaldar una agenda extrajudicial del nacionalismo cristiano”, continúa la petición del grupo:
También estamos alarmados por la naturaleza de dos banderas que han ondeado frente a su casa, desafiando directamente nuestro sistema democrático de elecciones y nuestro propio sistema judicial. Una de las banderas, el “Llamado al Cielo”, es incluso un símbolo del nacionalismo cristiano que portan los insurrectos. Usted no es apto para servir en el tribunal más alto de nuestra nación y exigimos que renuncie de inmediato.
Aunque Faithful America y otros grupos de izquierda a menudo intentan vincular la bandera del “Llamado al Cielo” con el llamado “nacionalismo cristiano”, la bandera en realidad se originó en 1775, durante la Revolución Americana.
Americanflags.com señaló: “La bandera Appeal to Heaven fue diseñada por el coronel Joseph Reed, quien se desempeñó como secretario personal de George Washington”.
La bandera, también conocida como La bandera del pino, fue “[o]riginalmente encargada para su uso en seis cruceros militares” y “se convirtió en la bandera oficial de la marina de Massachusetts en 1776”, indicó Americanflags.com:
La secretaria de Washington eligió un diseño simple pero impactante que presenta un pino singular, un símbolo de fuerza y resistencia dentro de los estados de Nueva Inglaterra. Las palabras “Un llamado al cielo” se extienden sobre un campo blanco, proclamando audazmente un llamado a Dios para salvar a los colonos del opresivo gobierno del Rey.
“La bandera de la Apelación al Cielo obtiene su significado del ‘Segundo Tratado sobre Gobierno Civil’ del filósofo británico John Locke”, añadió Americanflags.com. “Escrita en 1690, la obra era una colección de dos tratados que refutaban la creencia en los derechos divinos de los monarcas”
Es un hecho bien conocido que Locke era un firme partidario de la “separación de la Iglesia y el Estado”.
En su sitio web, Faithful America se autodenomina “la mayor comunidad en línea de cristianos que ponen la fe en acción por el amor y la justicia social”.
Afirma que sus miembros, “católicos, protestantes y más, están hartos de quedarse sentados en silencio mientras la derecha religiosa secuestra el mensaje de buenas noticias de Jesús para servir a una agenda política odiosa”.
“Estamos organizando a los fieles para desafiar el nacionalismo cristiano y la supremacía blanca y renovar el papel profético de la iglesia en la construcción de una sociedad más libre y justa”, enfatiza el grupo.
Faithful America tiene una página web entera dedicada a “resistir el nacionalismo cristiano”. Alega:
Con cientos de políticos de extrema derecha usando el nombre de Cristo para negar los resultados electorales, demonizar a sus oponentes, promulgar una agenda teocrática y difundir peligrosas teorías de conspiración… el nacionalismo cristiano es la mayor amenaza tanto para la democracia como para la iglesia en la actualidad.
El lema del grupo es “Ama a tu prójimo. Sin excepciones”.