El parlamento de Irak busca aprobar una ley que reduciría la edad legal para que las mujeres contraigan matrimonio de 18 a nueve años.
El Telegraph informa que el parlamento está dominado en gran medida por partidos políticos musulmanes chiítas y que está tratando de aprobar una enmienda que derogue la “ley de estatus personal” del país, o Ley 188.
Estos partidos extremistas constituyen una gran mayoría en el Parlamento, según declaró al Telegraph el investigador Renad Mansour, del centro de estudios británico Chatham House, y cree que la enmienda está muy cerca de aprobarse.
Mansour afirmó: “Es lo más cerca que ha estado nunca. Tiene más impulso que nunca, principalmente debido a los partidos chiítas”.
Mansour aclaró: “No se trata de todos los partidos chiítas, sino sólo de algunos específicos que están empoderados y realmente están impulsando el movimiento”.
Dijo que no está claro cuándo el Parlamento votará sobre la enmienda.
La enmienda también privaría a las mujeres de los derechos al divorcio, la custodia y la herencia.
Las lagunas legales actuales en la legislación iraquí ya permiten que niñas de tan solo 15 años se casen si su padre da permiso. Sin embargo, como estos matrimonios los celebran líderes religiosos en lugar de los tribunales, no están reconocidos legalmente.
El Telegraph explica: “Pero como las nupcias no están reconocidas por la ley, a las niñas y a los hijos que puedan tener se les niegan una plétora de derechos”.
Añade: “Por ejemplo, los hospitales pueden rechazar el ingreso de mujeres para dar a luz sin un certificado de matrimonio”.
Mansour continuó explicando que revocar la enmienda alentaría aún más las divisiones sectarias en Irak, ya que la gente podría elegir si adherirse a la Ley 188 “secular” o a la nueva ley basada en la Sharia.
“Todo volvería a estar en manos de la secta”, afirmó Mansour. “Pero muchos iraquíes no quieren que su secta los defina políticamente, sino que los defina su gobierno y su Estado”.
Sarah Sanbar, investigadora sobre Irak de Human Rights Watch, añadió que la decisión sobre qué ley seguir recaerá en última instancia en los hombres.
“En el borrador se establece explícitamente que, en caso de disputa entre la pareja, la secta del marido tiene prioridad”, afirmó Sanbar. “Esto eliminará muchas protecciones para las mujeres… socavará el principio de igualdad ante la ley”.
Agregó que la ley favorecerá a las mujeres de ciertas sectas islámicas, mientras que otras mujeres “tienen que permanecer en situaciones perjudiciales porque temen perder la custodia de sus hijos”.