Open Doors, una organización dedicada a apoyar a los cristianos perseguidos, publicará su Lista Mundial de Vigilancia (WWL) de 2025 el 15 de enero, según un comunicado de prensa enviado por correo electrónico.
Este informe anual clasifica los 50 países donde los cristianos enfrentan la persecución más dura. Desde su creación en 1993, la WWL ha arrojado luz sobre la creciente gravedad de la persecución cristiana en todo el mundo, con más de 78 naciones clasificadas actualmente como que tienen niveles altos o extremos de opresión, en comparación con menos de 40 cuando comenzó la lista.
“Si bien las cifras y las clasificaciones sólo cuentan parcialmente la historia, ayudan a atraer la atención del mundo hacia los 380 millones de creyentes que sufren por su fe”, dijo el director ejecutivo de Open Doors, Ryan Brown, en el comunicado de prensa.
Destacó el valor de la WWL como una oportunidad para que los cristianos de todo el mundo oren y apoyen a sus hermanos y hermanas perseguidos. La WWL no solo identifica tendencias en la persecución, sino que también comparte historias de resiliencia y fe.
El informe de 2024 , que refleja la persecución en 2023, ofreció un panorama desalentador de las amenazas que enfrentan los cristianos en todo el mundo. Más de 365 millones de cristianos —uno de cada siete creyentes en todo el mundo— sufrieron altos niveles de persecución y discriminación el año pasado. El informe identificó los 10 países más peligrosos para los cristianos:
- Corea del Norte: Durante más de 20 años, Corea del Norte ha sido considerada el país más peligroso para los cristianos. Los creyentes que son descubiertos practicando su fe son ejecutados o enviados a campos de trabajo, y a menudo se ataca a familias enteras. A pesar del peligro, sigue funcionando una iglesia clandestina de aproximadamente 350.000 a 400.000 creyentes.
- Somalia: Los cristianos de Somalia, especialmente los que se han convertido al Islam, son perseguidos por grupos extremistas como Al Shabab y sufren una violencia letal por parte de sus familias y comunidades. A pesar de los riesgos, los cristianos somalíes se mantienen firmes en su fe.
- Libia: La conversión al cristianismo en Libia se considera una traición y los creyentes pueden ser encarcelados o condenados a muerte. La evangelización está estrictamente prohibida y las pocas comunidades cristianas que existen operan en secreto.
- Eritrea: Conocida como la “Corea del Norte de África”, Eritrea persigue a los cristianos que se apartan de las denominaciones reconocidas por el Estado. Se cree que más de 1.000 cristianos están detenidos indefinidamente en duras condiciones, pero la iglesia clandestina sigue creciendo.
- Yemen: Los cristianos yemeníes se ven obligados a practicar su fe en secreto debido a los peligros extremos que plantea la ley islámica y la hostilidad social. Muchos viven aislados, sin poder reunirse para el culto ni siquiera para revelar su fe a sus familias.
- Nigeria: En Nigeria, donde cada dos horas muere un cristiano en promedio, hay más mártires que en cualquier otro país. Los cristianos, en particular en el norte, de mayoría musulmana, sufren ataques incesantes de extremistas islámicos y bandidos armados, que dejan a las comunidades desplazadas y traumatizadas.
- Pakistán: Los cristianos en Pakistán se enfrentan a una discriminación sistémica, violencia y acusaciones falsas en virtud de las leyes de blasfemia. Son tratados como ciudadanos de segunda clase y sometidos a condiciones degradantes en su vida diaria.
- Sudán: El conflicto en curso en Sudán ha devastado las comunidades cristianas: 165 iglesias han sido destruidas y muchos cristianos han sido desplazados. Los conversos del Islam enfrentan una persecución inmensa, incluso por parte de sus familias.
- Irán: La conversión al cristianismo en Irán se considera un “delito contra la seguridad nacional”, y los conversos pueden ser encarcelados y acosados. A pesar de ello, la iglesia clandestina sigue creciendo.
- Afganistán: El regreso de los talibanes al poder ha empujado a la comunidad cristiana afgana, ya de por sí perseguida, a una situación aún más clandestina. Los conversos del Islam se enfrentan a una muerte segura si son descubiertos, y no hay espacio para la libertad religiosa en la sociedad ni en el gobierno.
La WWL de 2024 destacó el papel cada vez mayor del extremismo islámico, los regímenes autoritarios y las hostilidades culturales en la persecución de los cristianos. A medida que se acerca la publicación de la WWL de 2025, Puertas Abiertas sigue haciendo un llamamiento a la iglesia mundial para que se una en oración, defensa y apoyo a los cristianos perseguidos, haciendo hincapié en la resiliencia y la fe inquebrantable de los creyentes que se mantienen firmes frente a la persecución incesante.