El famoso equipo de béisbol de Los Ángeles, los Dodgers, anunciaron este lunes que iban a dar marcha atrás a la cancelación de la premiación de uno de los grupos más anticatólicos de los Estados Unidos, y que proseguirá con el plan original de premiar a las autodenominadas “Hermanas de la Perpetua Indulgencia”.
“Los Ángeles Dodgers quisiéramos ofrecer nuestras más sinceras disculpas a las Hermanas de la Perpetua Indulgencia, a los miembros de la comunidad LGBTQ+ así como a sus amigos y familias” dice el comunicado de claudicación de Los Dodgers.
El comunicado, que no se atrevieron a publicar en su cuenta de Twitter en español, dice que, después de haber decidido suspender la premiación del grupo travesti y transexual anticatólico -fundado para burlarse de las religiosas católicas de hábito-, tras las quejas de numerosos fans católicos, “les hemos pedido que tomen su lugar en el diamante duante nuestro décimo aniversario de nuestra noche del Orgullo LGBTQ+.”
“Nos complace poder compartir que han accedido a recibir la gratitud colectiva de nuestras comunidades por el trabajo de salvar vidas que han hecho incansablemente durante décadas”, agrega el comunicado, que no incluye ninguna disculpa a los católicos.
A mediados de mayo el famoso equipo de Béisbol de la Ciudad de Los Ángeles, que tiene un importante número de fans hispanos, muchos de ellos católicos, anunció que para el “mes del orgullo LGBT” -junio, el mes en el que los católicos celebran al Sagrado Corazón de Jesús- habían programado honrar al grupo de odio “Hermanas de la Perpetua Indulgencia”, un grupo de travestis que se visten como religiosas, con hábitos muchas veces genuinos, pero con exagerado maquillaje y prótesis sexuales, que despliegan en bailes y actos lascivos.
Las pseudo “Hermanas” organizan actividades abiertamente eróticas y anti cristianas durante la Pascua de Resurrección, y durante el Viernes Santo organizan una ridiculización del Vía Crucis, que consiste en visitar 14 bares homosexuales y de desnudismo para burlarse de la fe católica.
Originalmente los Dodgers aceptaron las quejas de importantes grupos religiosos, incluyendo Voto Católico, y una carta del Senador del estado de La Florida Marco Rubio. También el Presidente de Catholic Vote y Voto Católico, Brian Burch, había dirigido una carta en inglés al comisionado de la Liga Profesional de Béisbol (MLB), señalando que “sinceramente dudamos que los Dodgers le den tal premio a un grupo que haya hecho una parodia similar de la fe judía o musulmana”.
Sin embargo, la presión de organizaciones y personalidades en el estado de California finalmente hicieron que los Dodgers sucumbieran al creciente poder del lobby LGBT.
Joshua Mercer, Vicepresidente de Programación de Catholic Vote y Voto Católico, hizo este lunes un llamado a los fans hispanos de Los Ángeles a que “hagan sentir su poderosa voz contra este acto que muestra que la gran mayoría del mundo corporativo teme herir las sensibilidades de una pequeña pero poderosa minoría; pero no le importa en lo más mínimo ofender a los cristianos porque cuentan con que nos quedaremos callados.”
“El gigante dormido del cristianismo hispano debe despertar para demostrarle a los Dodgers, y a todas las demás corporaciones que quieren ponerse del lado contrario a nuestra fe, que no se dejarán ignorar y pisotear”, concluyó Mercer.