Los Maestros y los Dodgers
Esta interesante columna se refiere al homenaje que los Dodgers rindieron a una agrupación drag anticatólica, pero refiriéndose a quienes han pasado desapercibidos: los maestros. En efecto, la Asociación de Maestros de California presionó al equipo de beisbol para que repusiera el homenaje a la vulgar agrupación, demostrando con ello que la educación pública californiana (y, por qué no, nacional) no sólo es una aplanadora ideológica de innegable mediocridad, sino un territorio hostil para los católicos.
Brenda Lebsack y Rebecca Friedrichs escibieron en Real Clear Politics que “según CatholicVote, las Hermanas de la Perpetua Indulgencia son “una vil organización anticatólica”. Su lema es “Ve y peca un poco más”, y utilizan la cruz para los bailes de barra. El grupo satiriza las creencias católicas en aras del activismo. Se burlan del Domingo de Pascua con un concurso de Hunky Jesus/Foxy Mary. Según la Liga Católica, celebran “Concursos de confesiones a medianoche”, premiando las “confesiones más calientes””.
“Así que tiene sentido que los aficionados de los Dodgers se desmelenaran cuando se enteraron de que su equipo iba a premiar a las anticatólicas y anticristianas “Hermanas de la Perpetua Indulgencia”. Los Dodgers retiraron su premio en respuesta a la indignación de los clientes y desinvitaron a las “Hermanas”, pero la Asociación de Maestros de California (CTA) intervino y obligó a los Dodgers a apoyar a los pervertidos en contra de la voluntad de sus clientes. El nuevo punto del orden del día de la CTA de mayo de 2023 dice: “La CTA emitirá una declaración pública condenando la reciente decisión de los Dodgers de rescindir el Premio al Héroe de la Comunidad para las Hermanas de la Perpetua Indulgencia””, señalan las autoras.
“Como maestras veteranas de California que han servido dentro de los sindicatos y personalmente han sido testigos de la agenda radical que CTA impone a los maestros, nos parece sospechoso que mientras los Dodgers están recibiendo tanta presión legítima por su celebración del 16 de junio de las ofensivas “Hermanas”, la CTA está saliendo impune. La ofensiva intrusión de la CTA en el pasatiempo nacional de Estados Unidos y su apoyo a las drag queens que se burlan de las monjas es escandalosa. Por eso, los estadounidenses con criterio están hartos y se levantan en protesta contra los llamados sindicatos de profesores”, continúa la columna.
“El Padre Sebastian Walshe de la Abadía de San Miguel en la Diócesis de Orange expresa: “La declaración de la CTA debería alarmar a todos los padres católicos que envían a sus hijos a las escuelas públicas de California. Ninguna escuela debería ser un lugar donde se sexualice a los niños o se les enseñen prejuicios anticatólicos””, añaden Lebsack y Friedrichs.
“La CTA racionaliza su postura con: “La decisión de los Dodger hunde sus raíces en el mismo fanatismo que ha llevado a prohibir los libros LGBTQIA+, a criminalizar los espectáculos de drags y a privar a los menores de atención médica que puede salvarles la vida.” Pero esta afirmación es engañosa. Los estadounidenses están rechazando los libros pornográficos, los espectáculos de drag queen y las cirugías de transición de sexo en niños porque estas cosas son destructivas para los niños y una afrenta para las familias y los valores estadounidenses”, añaden.
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Foto: lesly-juarez/unsplash