El obispo taiwanés Philip Huang Chao-ming ofrece sus condolencias y oraciones por aquellos que han sido afectados por el terremoto de magnitud 7,4 que tuvo lugar en la diócesis de Hualien el miércoles.
“Los violentos temblores de esta mañana provocaron desastres en varios condados y ciudades, particularmente en Hualien, que sufrió los mayores daños”, dijo el obispo Huang Chao-ming en reacción a la catástrofe, según AsiaNews. “Esperamos que los más afectados sean rescatados rápidamente. Busquemos en nuestras preocupaciones y temores la paz de Jesús Resucitado. Que la paz del Señor esté con nosotros”.
La Diócesis está trabajando “para ofrecer cercanía y atención” a todas sus parroquias tras el desastre. Aparte de algunos objetos que cayeron al suelo durante el terremoto, el obispo Huang Chao-ming afirmó en un mensaje publicado el miércoles en el sitio web diocesano que no se han producido daños importantes.
El terremoto de esta semana, que mató a nueve personas e hirió a más de 900, fue el mayor ocurrido en el país en 25 años, según un informe de Reuters del 4 de abril. Además, se ha reportado la desaparición de 50 personas. En 1999, un terremoto de magnitud 7,6 mató a aproximadamente 2.400 personas y destruyó o dañó 50.000 edificios.
Dado que continúan las réplicas del terremoto, el obispo Huang Chao-ming animó a los fieles, incluidos los párrocos, los comités pastorales y los feligreses, a permanecer alerta, mantenerse alejados de los edificios y buscar refugio en espacios abiertos.
“Permanecemos aquí para atender las necesidades y ayudar en el trabajo organizativo de manera oportuna”, agregó: “¡Que Dios les conceda la paz! ¡Dios bendiga a Taiwán!”