El Primer Ministro húngaro, Viktor Orbán, recibió al patriarca sirio ortodoxo Ignacio Aphrem II en el Monasterio Carmelita de Budapest para abordar la creciente crisis en Siria tras la toma de Alepo por extremistas islamistas.
Las discusiones del 2 de diciembre se centraron en la creciente amenaza a los cristianos y otras minorías religiosas en la región, informó Hungary Today.
Miles de insurgentes sirios, liderados por el grupo islamista radical Hayat Tahrir al-Sham, tomaron el control de la mayor parte de Alepo el 30 de noviembre. Establecieron bastiones en la ciudad más grande del país, tomaron el control de su aeropuerto y expandieron su ofensiva a una provincia vecina.
Ayuda a la Iglesia Necesitada pidió recientemente a los católicos de todo el mundo y al gobierno de Estados Unidos que tomen medidas inmediatas para evitar una masacre inminente de cristianos y otras minorías religiosas en Siria.
En la reunión, Orbán reafirmó la dedicación de Hungría a la promoción de la paz y al apoyo a los cristianos perseguidos en el escenario mundial. Subrayó que Hungría seguirá esforzándose por garantizar la seguridad de las comunidades vulnerables.
El Patriarca agradeció a Hungría por su firme apoyo, enfatizando los graves desafíos que enfrentan los cristianos en Alepo, que alberga la mayor población de católicos de varios ritos orientales en Siria.
Tristan Azbej, secretario de Estado del Programa Hungría Ayuda, participó en la reunión del 2 de diciembre y expresó su profunda preocupación por la difícil situación de los cristianos sirios. El Programa Hungría Ayuda , una iniciativa gubernamental basada en la fe, proporciona ayuda humanitaria, reconstruye infraestructuras y fomenta condiciones sostenibles para apoyar a las comunidades perseguidas en todo el mundo.
Azbej expresó su preocupación en un comunicado en las redes sociales, destacando los preocupantes acontecimientos en Alepo, donde las tensiones han aumentado debido a actos provocadores, como la destrucción de árboles de Navidad y el canto de consignas violentas.
CatholicVote informó que el misionero argentino P. Hugo Alaniz, IVE, dijo que ya hay “muchos muertos y heridos” por los enfrentamientos entre los extremistas y los civiles.
En Alepo, unos 20.000 cristianos se encuentran en situación de vulnerabilidad. Las interrupciones en las cadenas de suministro están agravando su sufrimiento. Azbej dijo que el personal de Hungary Helps está siguiendo de cerca la situación y preparándose para proporcionar ayuda humanitaria.
Añadió: “Nos solidarizamos con nuestros hermanos y hermanas cristianos en Siria en estas horas de crisis”.