Una investigación del Instituto de Políticas Kem C. Gardner arrojó que el 81% de padres en Utah considera que lo mejor para sus familias sería que uno de los padres o tutores cuidara a sus hijos luego del colegio. Al igual que en Utah, a nivel nacional la mayoría también prefiere la presencia de un padre en casa, según un informe del Instituto para el Estudio de las Familias, y una encuesta de Home Building para American Compass. Todo ello de acuerdo a un artículo publicado en inglés en Deseret News.
El artículo da cuenta de la importancia que tiene la presencia de uno de los padres en casa, y de la dificultad de que esto ocurra a pesar de las intenciones y preferencias de los padres. De hecho, para muchos padres se trata de un escenario muy difícil de conseguir dada la necesidad de que ambos padres trabajen, muchas veces a tiempo completo. Al respecto, el artículo menciona un informe del Instituto para el Estudio de las Familias, copatrocinado por el Instituto Wheatley, que arroja que la mayoría de las madres a nivel nacional preferirían trabajar a tiempo parcial o simplemente no trabajar, en lugar de tener sus trabajos a tiempo completo.
La publicación, sin embargo, señala que las políticas públicas que se vienen adoptando no están tomando en cuenta estas preferencias, ni la importancia de la presencia de los padres en casa. Por ejemplo, el artículo hace notar que estas políticas en enfocan en las familias en las que ambos padres quieren trabajar, centrando el enfoque en la posibilidad de contar con guarderías, entre otras medidas.
“El debate actual”, señala el autor, “tanto a nivel estatal como nacional, está en su punto para redefinir lo que debería ser un enfoque verdaderamente favorable a las familias: empoderar a los padres para que puedan crear el entorno que consideren mejor para sus hijos, con el respaldo de la situación laboral que mejor atienda sus necesidades y preferencias familiares”.
Sin embargo, la publicación aclara que “nada de esto refuta el hecho de que muchos padres que trabajan -incluidos los padres solteros y los que se esfuerzan por salir de la pobreza- necesitan el acceso a un cuidado infantil asequible en un entorno seguro y saludable. Tampoco subestima el trabajo vital de los proveedores de cuidado infantil, muchos de los cuales todavía se están recuperando de los efectos de la pandemia. Tampoco debería disuadir a los líderes empresariales y a los responsables políticos de ayudar a más padres a entrar y permanecer en la fuerza de trabajo”.
Pero “los padres que trabajan quieren volver a priorizar el tiempo con sus hijos. Dados los beneficios a largo plazo de las familias sanas en los resultados educativos, sociales y económicos de los niños, deben ser apoyados en esto. Y podemos hacerlo de una manera que también apoye a los lugares de trabajo.
Dotar a los padres de más libertad para que puedan hacer realidad la visión de la vida laboral y familiar que más les conviene a ellos y a sus hijos fortalecerá a las familias, reforzará nuestra economía y responderá a un movimiento crucial en la vida familiar estadounidense. No perdamos la oportunidad”.
Puede leer el artículo en inglés aquí.
—
Foto: Marisa Howenstine / Unsplash