El número de cristianos en Irán que enfrentan arrestos no provocados y otras violaciones de la libertad religiosa continúa aumentando según los últimos informes, que afirman que la mayoría de las víctimas de la persecución de la República Islámica siguen siendo “sin rostro”.
Según un informe anual, titulado “Víctimas sin rostro: violaciones de derechos contra los cristianos en Irán”, los cristianos que practican activamente su fe, especialmente los conversos, son más frecuentemente objeto de persecución a manos del Estado.
El informe fue elaborado por Article18, una organización de defensa dedicada a garantizar el cumplimiento por parte de Irán de los estándares nacionales e internacionales de libertad religiosa definidos en el artículo 18 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (PIDCP).
El informe afirma que, aunque el aumento en el número de arrestos de cristianos informados públicamente parece pequeño, “ascendiendo a 166 en 2023 en comparación con 134 en 2022”, el número real probablemente sea mucho mayor.
“Muy pocos de los arrestados aceptaron hacer públicos sus casos”, afirma el informe, “lo que lleva a un número cada vez mayor de víctimas sin rostro”.
El informe continuó:
A finales de 2023, al menos 17 de los cristianos detenidos durante el verano habían recibido penas de prisión de entre tres meses y cinco años o penas no privativas de la libertad como multas, azotes y, en un caso, la obligación de cavar tumbas.
Dos cristianos arrestados en el verano de 2023, Hakop Gochumyan y su esposa Elisa Shahverdian, fueron identificados como armenios. Estaban entre docenas de personas que fueron arrestadas durante un período de siete semanas en junio y julio, y obligadas a firmar “compromisos de abstenerse de realizar más actividades cristianas o se les ordenó asistir a sesiones de reeducación islámica”.
“La naturaleza arbitraria de estos arrestos queda ilustrada por el hecho de que los detenidos que finalmente fueron obligados a firmar compromisos de abstenerse de actividades cristianas ya no enfrentaron nuevas acciones legales”, afirma el informe.
Como señaló AsiaNews en su informe, la fecha de publicación del informe, el 19 de febrero, coincide con el asesinato del reverendo Arastoo Sayyah, asesinado en su oficina ocho días después de la Revolución Islámica de 1979. Ese día fue “el primero de una larga serie de acontecimientos sangrientos contra los cristianos, especialmente los conversos, que continúa hasta el día de hoy”, escribió el medio de comunicación.