El Washington Post, en colaboración con la Asociación para el Servicio Público, ha publicado datos que comparan las confirmaciones del presidente Donald Trump en el Senado en su primer año con las de otros presidentes recientes de Estados Unidos.
El análisis muestra que las cifras de Trump están por detrás de las de George W. Bush, Barack Obama, Joe Biden e incluso de las de su propio primer mandato.
El Senado ha confirmado sólo 86 de los nominados de Trump en lo que va del año, a pesar de que el Presidente ha presentado 339 nombres para cubrir puestos clave en la administración.
Esa tasa de confirmación está significativamente por debajo del ritmo observado en los primeros años de presidencias anteriores. Según el análisis, al final de sus respectivos primeros años, Bush contaba con 403 confirmaciones, Obama con 383, Biden con 267 y el propio primer mandato de Trump con 238.
El bajo número de confirmaciones no se debe a la falta de nominados. De los 821 puestos clave que se están evaluando —de un total de aproximadamente 1300 puestos que requieren la aprobación del Senado—, 253 nominados por Trump aún esperan la decisión del Senado, mientras que 306 puestos actualmente no tienen nominado. Otros 182 puestos están cubiertos por personas que permanecen en el cargo o que ocupan puestos temporales.
Cada cargo confirmado por el Senado requiere varios pasos: nominación, remisión a comités, audiencias y votación en pleno del Senado. En los últimos años, el proceso se ha vuelto más lento, especialmente en cámaras políticamente divididas.
El número total de confirmaciones hasta la fecha sitúa a este año en camino de ser el ciclo de confirmaciones de primer año más lento en la historia presidencial reciente. Es incierto si el ritmo se acelerará en los próximos meses.
Entre las nominaciones pendientes se encuentra el expresidente de CatholicVote, Brian Burch, seleccionado para ejercer como embajador de Estados Unidos ante la Santa Sede. Su nominación avanzó en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado en abril con una votación de 12 a 10, pero se retrasó el 13 de mayo cuando los demócratas del Senado bloquearon el consentimiento unánime para una votación en el pleno. No se ha programado una votación final.