Salesianos En Ghana Buscan Ampliar Misión Evangelizadora
Los Salesianos en Ghana están ampliando su alcance pastoral y social con el apoyo de fondos de donantes de Salesian Missions, el brazo de desarrollo estadounidense de los Salesianos de Don Bosco.
Según MissionNewswire, la Provincia de San José en Ashaiman ha adquirido un nuevo vehículo, lo que mejora su capacidad para viajar entre los centros salesianos en Ghana, Togo, Liberia, Sierra Leona y Costa de Marfil. Esto permite a los salesianos satisfacer de manera eficiente las necesidades pastorales de varias comunidades.
Además, la financiación ha reforzado las actividades de la comunidad de Santo Domingo Savio en Tatale. Se han proporcionado suministros esenciales como alimentos, electricidad, tratamiento médico y combustible para el transporte, lo que garantiza el bienestar y la continuidad operativa de la parroquia y sus 52 puestos de avanzada.
Un salesiano africano expresó su gratitud por la financiación de los donantes y destacó el papel esencial de la financiación de los vehículos para satisfacer las necesidades de la comunidad y mantener las estaciones remotas. “Los salesianos deben viajar largas distancias para realizar visitas pastorales y celebrar la misa católica”, dijo. “El viaje es costoso, al igual que el mantenimiento de los automóviles y las motocicletas. Tener un transporte confiable es fundamental”.
“Estamos agradecidos a los donantes por su apoyo a nuestro trabajo”, afirmó.
Los Salesianos de Don Bosco, fundados por San Juan Bosco, son un instituto religioso católico internacional dedicado a la educación y el bienestar de los jóvenes, especialmente de aquellos que son pobres y están en riesgo. Su misión incluye brindar atención pastoral, programas educativos y servicios sociales a comunidades de todo el mundo.
Según UNICEF, a pesar de las mejoras en la economía de Ghana, casi el 45% de la población vive con menos de un dólar al día. La pobreza rural está muy extendida en la región de la sabana seca, que abarca dos tercios del norte de Ghana. Las pequeñas explotaciones agrícolas tienen dificultades debido a la falta de infraestructura y equipamiento, lo que dificulta su transición de la agricultura de subsistencia a la agricultura comercial moderna, que podría aumentar los ingresos y reducir la pobreza.
