Los fiscales del polémico caso de la ciudad de Nueva York contra el presidente electo Donald Trump indicaron el martes que probablemente pospondrán la sentencia, un avance que la administración entrante elogió como una “victoria total y definitiva”.
El Wall Street Journal (WSJ) informó que los fiscales de Manhattan “acordaron posponer los procedimientos adicionales en el caso de sobornos contra Donald Trump, pero se opusieron a la propuesta del presidente electo de desestimar su condena”.
El New York Times señaló que los fiscales “plantearon la posibilidad de congelar las sentencias durante cuatro años” aunque “reconocieron la naturaleza sin precedentes del caso”.
“El juez, Juan M. Merchan, decidirá ahora en las próximas semanas si congela el caso o lo desestima directamente, una decisión trascendental que determinará el resultado del único de los cuatro casos penales del señor Trump que llegó a juicio”, añadió el Times.
El nuevo director de comunicaciones de la Casa Blanca de Trump, Steven Cheung, escribió en una declaración: “Esta es una victoria total y definitiva del presidente Trump y del pueblo estadounidense que lo eligió de manera aplastante”.
“El fiscal del distrito de Manhattan ha admitido que esta cacería de brujas no puede continuar”, añadió la declaración de Cheung. “El caso ilegal ha quedado suspendido y el equipo legal del presidente Trump está trabajando para conseguir que se desestime de una vez por todas”.
El 30 de mayo, un jurado de Manhattan condenó a Trump por 34 delitos graves de falsificación de registros comerciales, lo que provocó una amplia reacción negativa.
El fiscal de distrito del condado de Nueva York, el demócrata Alvin Bragg, encabezó la acusación que condujo a la condena. Durante su exitosa campaña para fiscal de distrito en 2021, Bragg había destacado notablemente sus demandas anteriores contra Trump y prometió, si era elegido, hacer que el expresidente “rindiera cuentas”.
Trump ha mantenido constantemente su inocencia, mientras que un coro de críticos de todo el espectro político ha sostenido que el caso era una “guerra jurídica” con carga política y que nunca debería haberse presentado en primer lugar.
Aunque los opositores al candidato republicano de 2024 esperaban que el nuevo estatus de Trump como “delincuente convicto” descarrilara su candidatura, provocó que sus partidarios se unieran a él y provocó una avalancha de donaciones para la campaña.
En última instancia, el veredicto de culpabilidad de mayo no impidió que Trump derrotara a la candidata presidencial demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris, en noviembre, lo que llevó a muchos analistas a afirmar que el caso de Manhattan y las diversas otras acusaciones legales formuladas contra Trump fueron contraproducentes para los demócratas.