Los talibanes anunciaron esta semana que las mujeres en Afganistán tienen prohibido estudiar medicina, una restricción que se produce al mismo tiempo que las mujeres en ciertas provincias también tienen prohibido ser tratadas por médicos varones.
Las mujeres ya no pueden estudiar en instituciones públicas o privadas para convertirse en parteras, enfermeras o dentistas, ni en otras profesiones, informó George Johnson en un artículo del 4 de diciembre para The Telegraph. El 2 de diciembre, el Ministerio de Salud Pública anunció la prohibición, emitida por el líder supremo de los talibanes, Haibatullah Akhundzada.
“Los talibanes también han prohibido que las mujeres de algunas provincias sean tratadas por profesionales médicos masculinos”, afirmó la organización Human Rights Watch el 3 de diciembre, “lo que significa que este nuevo decreto, que detiene la formación de nuevas trabajadoras sanitarias, provocará dolor, miseria, enfermedad y muerte innecesarios para las mujeres obligadas a prescindir de atención sanitaria, ya que no habrá trabajadoras sanitarias femeninas para tratarlas”.
Esta prohibición pone a las mujeres y las niñas en peligro mortal, dijo un experto de Human Rights Watch.
“Esto cierra una de las pocas lagunas que aún quedaban en la prohibición de los talibanes de brindar educación a mujeres y niñas”, dijo Heather Barr, directora adjunta interina de Derechos de la Mujer de Human Rights Watch, al Independent, y agregó: “pero también es una laguna particularmente importante porque esto provocará la muerte de mujeres y niñas”.
En el artículo de Johnson también se enumeran algunos datos que indican que los talibanes han prohibido a las mujeres afganas hablar en público, en voz alta en el interior de las casas o ante médicos varones. También tienen prohibido viajar solas, tener teléfonos inteligentes, cantar, practicar deportes, ir al parque o al gimnasio, viajar al extranjero, asistir a protestas o mostrar el rostro en público, entre otras prohibiciones. Las niñas no pueden ir a la escuela secundaria.