La Cámara de Representantes de Texas, de mayoría republicana, aprueba una nueva ley para castigar a legisladores que huyan del estado y paralicen el quórum, como ocurrió en 2021.
La Cámara de Representantes de Texas ha aprobado una controvertida medida que busca disuadir la deserción legislativa: una nueva ley que permitirá sancionar a los legisladores estatales que abandonen el estado con el fin de evitar el quórum legislativo. Esta norma surge como respuesta directa a la acción de 2021, cuando más de 50 legisladores demócratas huyeron a Washington D.C. en protesta contra un proyecto de ley electoral promovido por los republicanos. Con esta estrategia, los demócratas lograron frenar temporalmente el avance de dicha legislación.
La nueva norma permitirá que los legisladores ausentes pierdan privilegios clave como sus salarios, viáticos y acceso a oficinas si abandonan el estado sin justificación válida durante sesiones en curso. Según los promotores de la ley, esta medida busca garantizar la integridad del proceso legislativo y evitar que una minoría política impida el funcionamiento democrático. “No podemos permitir que una estrategia partidaria sabotee las instituciones que los texanos eligen para representarlos”, señaló uno de los legisladores republicanos.
🚨 | Texas House approves arrest warrants against out-of-state Democratic lawmakers pic.twitter.com/0A4pfSFW9e
— VOZ (@Voz_US) August 4, 2025
La fuga de los legisladores demócratas en 2021 no solo paralizó el trabajo legislativo, sino que desencadenó una batalla política que atrajo la atención nacional. Durante semanas, el Congreso de Texas no pudo avanzar en su agenda mientras los legisladores prófugos buscaban respaldo federal para frenar la legislación electoral impulsada por los republicanos. Esta acción, aunque legal, fue duramente criticada por el oficialismo texano, que la calificó de “fuga cobarde”.
La nueva ley ha sido calificada por los demócratas como una represalia autoritaria que socava el derecho a la protesta legislativa. Para muchos, esta medida establece un precedente preocupante, donde el desacuerdo político puede ser castigado con la supresión de derechos institucionales. “No se puede legislar a punta de castigos. Esta norma transforma el disenso en delito”, declaró un legislador demócrata tras la aprobación.
Texas Rep. @JonesJolanda on Abbott's arrest threats: I'm a lawyer. There is no felony in the Texas penal code for what he says. Respectfully, he's making up some shit, okay? He has no legal mechanism. He's putting up smoke and mirrors. pic.twitter.com/xfXK4eDxoV
— FactPost (@factpostnews) August 4, 2025
Este episodio refleja el creciente clima de polarización política en Texas, donde el control republicano del poder estatal ha dado lugar a reformas cada vez más estrictas en materia electoral, educativa y de orden público. La ley contra la deserción legislativa se suma a una serie de medidas que buscan fortalecer el poder de la mayoría republicana frente a una oposición que recurre a tácticas excepcionales para resistir.