Texas se convirtió el jueves en el último estado en cortar lazos con la American Library Association (ALA) por la infiltración marxista que ha sufrido.
El representante estatal Brian Harrison, Republicano por Texas, anunció la decisión sobre X (antes Twitter) y escribió que la medida fue una “¡Gran victoria!”. Harrison había pedido a la Comisión de Archivos y Bibliotecas del Estado de Texas “el mes pasado que cortara los lazos después de elegir a una socialista radical y autodenominada ‘lesbiana marxista’ como presidenta”, como informamos a inicios de este mes.
El legislador se refirió a la nueva presidenta de ALA, Emily Drabinski, quien tras su elección tuiteó que cree que “el poder colectivo es posible de construir y puede ejercerse para un mundo mejor”. Más tarde borró la publicación. A principios de este mes, Drabinski calificó la reacción violenta contra sus palabras como “lamentable” y afirmó que solo pretendía “destacar y celebrar dos aspectos” de su “identidad”. Como si ser lesbiana y marxista tuviera algún tipo de mérito.
“Esta es una victoria para todos los tejanos”, declaró Harrison esta semana “y aplaudo la valiente y crucial decisión de la presidenta Martha Wong. Texas debería liderar la lucha contra la ideología marxista peligrosa, no subsidiándola con los dólares de los impuestos ganados con tanto esfuerzo por mis electores”. Prometió “seguir luchando para proteger a los tejanos de que su dinero sea usado como arma contra ellos, sus valores y sus hijos”.
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Foto: matthew-feeney/unsplash