En un discurso ceremonial pronunciado esta mañana en el Pentágono para conmemorar los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, el presidente Donald Trump recordó a las víctimas y destacó la fortaleza de Estados Unidos para superar la adversidad.
En ese fatídico día, monstruos salvajes atacaron los símbolos mismos de nuestra civilización. Sin embargo, aquí en Virginia y en Nueva York, y en los cielos de Pensilvania, los estadounidenses no dudaron —dijo Trump— . Se mantuvieron firmes y demostraron al mundo que nunca cederemos, nunca nos doblegaremos, nunca nos rendiremos, y que nuestra gran bandera estadounidense nunca, jamás, fallará.
La ceremonia en el Pentágono rindió homenaje a los 184 militares y civiles que murieron cuando secuestradores estrellaron un avión contra el edificio. Trump rindió homenaje público a dos hombres presentes en la ceremonia: el sargento de primera clase del ejército Steve Workman, quien arriesgó su vida para salvar a otros en el Pentágono, y el subteniente del ejército Luke Taylor, hijo del teniente coronel del ejército Kip Taylor, quien falleció cuando el avión se estrelló contra su oficina. Taylor falleció pocas semanas antes del nacimiento de su hijo.
“Luke, la viva imagen de su padre, dice que cada vez que se pone el uniforme, se siente conectado con él y con nuestro país, pero era un padre que nunca conoció”, dijo Trump. “Luke, tus padres están juntos en el cielo y no podrían estar más orgullosos del hombre que han formado”.
Trump compartió anécdotas de varios hombres y mujeres que murieron en los atentados, incluyendo a Chuck Costello, mecánico de ascensores y Caballero de Colón, quien perdió la vida en el World Trade Center al intentar rescatar a las personas atrapadas en el interior. Trump dijo que, tras su muerte, la viuda de Costello descubrió una oración que él había escrito: «Ayúdame a iluminar el camino de quienes están en la oscuridad, y cuando entre en ella, que no entre en pánico, sino que espere pacientemente para recordar la luz».
Trump agregó que en memoria de las víctimas de los ataques, “hacemos una promesa solemne y noble: honraremos —siempre— a nuestros grandes héroes”.
“Defenderemos la nación a la que sirvieron, los valores que defendieron y la libertad por la que murieron”, prometió. “Apoyaremos a nuestras tropas, protegeremos a nuestras familias y preservaremos el estilo de vida estadounidense para cada generación futura. Construiremos con más fuerza, nos haremos más fuertes, lucharemos con más ahínco y volaremos más alto. Y juntos, avanzaremos como un solo pueblo con un solo corazón, un solo destino, una sola bandera y un solo glorioso destino bajo un solo Dios Todopoderoso”.
Además de conmemorar a las víctimas, el presidente rindió homenaje a Charlie Kirk , quien fue asesinado a tiros el 10 de septiembre durante un evento universitario. Como informó CatholicVote , Trump anunció que otorgará póstumamente a Kirk la Medalla Presidencial de la Libertad.