Como ahora hay que desenvainar la espada para afirmar que el pasto es verde, no es sorpresa que en Kansas haya toda una disputa porque la legislación define claramente a los individuos por su sexo biológico. Predeciblemente, esto tocó los nervios de algunas progresistas demócratas, incluida la gobernadora.
En abril, la Legislatura de Kansas, de mayoría republicana, anuló el veto impuesto por la gobernadora demócrata a la SB 180, la Declaración de Derechos de la Mujer. En este proyecto de ley, la Legislatura de Kansas tuvo “la audacia” de definir “sexo” y términos relacionados de una manera biológica, específicamente en la forma en que científicos y legisladores habían definido el término hasta hace unos pocos años.
La gobernadora Laura Kelly, demócrata, no solo vetó el proyecto de ley, sino que ordenó al gobierno que lo ignorara. El fiscal general republicano del estado, Kris Kobach, presentó una demanda para impedir que la administración de Kelly respalde una visión del sexo que entra en conflicto con la ley. Luego, un tribunal emitió una orden judicial temporal que requiere que Kelly cumpla con la ley hasta el 1 de noviembre, mientras continúa el caso legal.
El Departamento de Ingresos de Kansas respondió con otra acción legal más, alegando que Kobach carecía de la autoridad legal como fiscal general para presentar su demanda. El reportero John Hanna reveló el tema central del litigio: el significado de la palabra “sexo” en la ley de Kansas y la ideología que presenta el sentido vagamente definido de “género” de un individuo, como fundamentalmente superior a ella.
“Kobach argumenta que permitir que las personas cambien su identidad de género en las identificaciones estatales, que el estado etiqueta como su ‘sexo’, viola una ley de Kansas que entró en vigencia el 1 de julio y revirtió los derechos de las personas transgénero”, escribió Hanna de Associated Press. Se refiere a la “identidad de género en las identificaciones estatales”, sin embargo, la versión más reciente de las licencias de conducir del estado de Kansas usa la palabra “sexo”.
El mismo Departamento de Ingresos de Kansas, que impugna la demanda de Kobach, publicó imágenes de cómo se vería una versión de “Identificación real” de la licencia de conducir, y esas imágenes muestran claramente que “sexo”, no “identidad de género”, aparece en la licencia.
El gobierno de Kansas tiene buenas razones para categorizar a los residentes por sexo biológico, en lugar de una idea nebulosa como la identidad de género. El texto de SB 180 presenta las categorías claramente al proporcionar definiciones:
El “sexo” de un individuo significa el sexo de un individuo al nacer, ya sea masculino o femenino;
Una “hembra” significa un individuo cuyo sistema reproductivo biológico se
desarrolla para producir óvulos;
Un “macho” significa un individuo cuyo sistema reproductivo biológico se desarrolla
para fertilizar los óvulos de una hembra;
“Mujer” y “niña” se refieren a hembras humanas, y “hombre” y “niño” se refieren a
machos humanos;
“Madre” significa progenitor del sexo femenino, y “padre” significa progenitor del
sexo masculino; y
Con respecto al sexo biológico, las adaptaciones separadas no son inherentemente
desiguales.
Este debate se centra en una cuestión de verdad: ¿Es el sexo biológico la realidad fundamental que debería informar la política de un buen gobierno, o debería la “identidad de género” convertirse en la piedra angular de la ley?
Los defensores de las personas transgénero presionan por la identidad de género en nombre de la justicia para una minoría supuestamente perseguida, pero a menudo pasan por alto o minimizan las ramificaciones naturales de quitarle prioridad al sexo biológico en las políticas.
La mayoría de los seres humanos son claramente hombres o claramente mujeres. El movimiento de activistas transgénero aprovecha las pocas excepciones —aquellos que padecen trastornos del desarrollo sexual o disforia de género— para sugerir que el sexo no es binario. Pero el propósito del sexo biológico es la reproducción y los humanos se reproducen de una sola manera.
El sexo binario informa la composición química de hombres y mujeres, con efectos profundos en el desarrollo corporal. Las diferencias en el tamaño y la forma del cuerpo tienen ramificaciones claras en los deportes, los refugios para mujeres, los baños y vestuarios separados y otras situaciones.
Los republicanos en la Legislatura de Kansas llamaron a la SB 180, “Declaración de Derechos de la Mujer” porque tiene como objetivo proteger los espacios de las mujeres de la intrusión de los hombres biológicos. Los hombres disfrutan de algunas ventajas físicas, como el tamaño del corazón, sobre las mujeres en ciertos deportes, especialmente después de la pubertad.
Por esta razón, tiene sentido evitar que los machos biológicos compitan con las hembras biológicas. Muchas fotos de Lia Thomas, un hombre biológico que compitió en natación masculina antes de unirse al equipo de natación femenino, ilustran este punto. Y hace poco, la misma Riley Gaines [quien compitió contra William (Lia) Thomas] comentó de un levantador de pesas que no solo se infiltró en la categoría femenina, sino que además se burlaba de las mujeres en su disciplina.
También tiene sentido proteger a las mujeres de las miradas indiscretas de los hombres, que pueden afirmar identificarse como mujeres para acceder a los vestuarios y espiar a las mujeres en diversas etapas de desnudez. Aunque la mayoría de los hombres que afirman identificarse como “mujeres transgénero” pueden no representar tal amenaza, la naturaleza nebulosa de la “identidad de género” abre la puerta a muchos abusos. Si las autoridades abren los vestidores y vestidores de mujeres a hombres biológicos que afirman identificarse como mujeres, ¿cómo planean identificar y excluir a los mirón (o peor aún, a los posibles abusadores)?
Aunque el sexo biológico es bastante sencillo, la identidad de género es mucho más nebulosa. Si el gobierno adopta la idea de la identidad transgénero, ¿cuándo debería permitir que los hombres se presenten como mujeres? ¿Cómo mantiene el gobierno a las mujeres a salvo de trampas deportivas o mirones? ¿Debería el gobierno exigir hormonas y cirugía como prueba de la intención de una persona de hacer una verdadera “transición” al sexo opuesto?
Los demócratas como Kelly afirman que consagrar la verdad del sexo biológico en la ley aumentaría la “discriminación” contra quienes dicen identificarse como transgénero. Parecen priorizar la prevención de daños mal definidos relacionados con la aceptación social mientras ignoran la posibilidad de daños concretos como la violación en los baños de niñas .
En su declaración de veto del proyecto de ley, Kelly escribió: “Las empresas han dejado en claro que no están interesadas en hacer negocios con estados que discriminan a los trabajadores y sus familias. Al quitarles los derechos a los habitantes de Kansas y abrir el estado a demandas costosas e innecesarias, estos proyectos de ley dañarían nuestra capacidad de continuar rompiendo récords económicos y logrando nuevos acuerdos comerciales”.
La Legislatura de Kansas sabiamente rechazó este argumento falso. Si las empresas desean abandonar los estados por leyes de sentido común, tienen esa prerrogativa. Sin embargo, otras partes de la declaración de Kelly sugieren que la verdadera preocupación del gobernador no es económica sino moral. Kelly parece mucho más centrada en los “derechos” de los hombres que afirman identificarse como mujeres que en los derechos de las mujeres que pueden verse obligadas a cambiar junto con los hombres.
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Foto: sung-jin-cho/unsplash