Vaya mundo en el que vivimos. Por un lado, están los distritos escolares que buscan sexualizar a los niños con programas educativos y textos escolares mediocres e ideologizados. Por el otro, tenemos a este distrito escolar de Utah que decidió retirar la Biblia de sus escuelas después de que un padre se quejara de su contenido. Dado que las sapientes autoridades consideran que el contenido no es pornográfico, no fue retirada de las escuelas secundarias.
Just the News informó que “el segundo distrito escolar público más grande de Utah retiró la Biblia de sus escuelas primarias e intermedias después de que un padre molesto por la prohibición de libros presentara una queja contra el Buen Libro en protesta por una ley estatal que facilitaba la retirada de contenidos considerados “pornográficos o indecentes” de las escuelas”.
“Un comité que examinó la queja en el Distrito Escolar de Davis, que cuenta con casi 74 000 alumnos de preescolar a 12º curso, decidió “mantener el libro en circulación en la biblioteca escolar sólo en el nivel de secundaria, basándose en la adecuación a la edad debido a la vulgaridad o la violencia”, según el portavoz del distrito Christopher Williams, informó el viernes NBC News”, añade la nota.
“El padre que presentó la queja original escribió que la Biblia contiene “[i]ncesto, onanismo, zoofilia, prostitución, mutilación genital, felación, consoladores, violación e incluso infanticidio”, según una copia de la petición obtenida por The Salt Lake Tribune”, agrega la publicación.
Según el medio, “el comité de revisión determinó que la Biblia no tenía contenido pornográfico o indecente según la definición de la ley de Utah, razón por la cual sigue en las escuelas secundarias, dijo Williams a The Associated Press”.
“Una persona que quiere que la Biblia siga a disposición de todos los estudiantes apeló la decisión del comité, que será debatida por un panel de tres miembros del Consejo de Educación del distrito antes de pasar a la decisión del comité en pleno”, continúa la nota.
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Foto: aaron-burden/unsplash