En la tarde del 10 de octubre, católicos de todo el mundo se reunieron para orar y cantar juntos ante el Santísimo Sacramento en el corazón de la Iglesia.
Frente a la Basílica de San Pedro tuvo lugar la adoración y la bendición. En medio del Sínodo sobre la Sinodalidad de octubre de 2023, para el cual se reunieron 365 delegados de todo el mundo para discutir cuestiones urgentes de la Iglesia, el Vaticano ofreció un momento de tranquila contemplación.
La tranquila velada en San Pedro dio a los católicos la oportunidad de contemplar en silencio a Cristo en la Eucaristía dentro de “los brazos de la Madre Iglesia”, como su artista, Gian Lorenzo Bernini, describió las columnatas de la Plaza del Vaticano.
La lectura del evangelio de ese día fue la historia de Marta y María de Lucas, capítulo 10, que trata sobre la contemplación de Cristo.
El pasaje dice:
“Marta, cargada de mucho servicio, se le acercó y le dijo: ‘Señor, ¿no te importa que mi hermana me deje sola para servir? Dile que me ayude.
El Señor le respondió: ‘Marta, Marta, estás ansiosa y preocupada por muchas cosas. Sólo se necesita una cosa’”.
Peregrinos, visitantes, hermanas y sacerdotes tuvieron la oportunidad de contemplar esa “única cosa” anoche en San Pedro.