Verástegui Hace Rabiar A La Izquierda Mexicana Con La Luz Verde Del INE Para La Formación De Su Partido Político
El reciente aval del Instituto Nacional Electoral (INE) para que Movimiento Viva México inicie el proceso de convertirse en partido político ha causado un terremoto mediático y político en el país. El liderazgo de Eduardo Verástegui, su postura abiertamente católica, conservadora y provida; y la posibilidad de que surja un nuevo bloque de derecha real han puesto a la izquierda en modo de ataque.
Desde que el INE validó su solicitud, el 24 de febrero por la mañana, Verástegui ha dominado la conversación pública, acumulando casi 15,000 publicaciones en X (antes Twitter) en pocos días. Durante tres días consecutivos, ha sido tendencia nacional, con todos los medios abordando el tema.
Sheinbaum responde: ataques y desdén desde Palacio Nacional
El tema llegó hasta la “mañanera” (conferencia de prensa matutina diaria) de la presidente Claudia Sheinbaum, quien este martes 25 acusó a Verástegui de “racismo” y de sostener un discurso de “ultraderecha” y “clasista”, aunque minimizó el impacto que pueda tener en México.
“No sé si realmente lo crea o es parte de su manera de darse a conocer, pero tiene un discurso de ultraderecha, muy conservador, de racismo, de clasismo. Ahora, yo creo que en México no tiene mucho asidero por la historia de México, una historia de un liberalismo muy grande”, declaró.
Sheinbaum también se sumó a la campaña de la prensa progresista que intenta vincular a Verástegui con el nazismo, citando el supuesto saludo que hizo en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC) en EE.UU., aunque el actor lo ha desmentido.
Además, la mandataria señaló que estos discursos “son rechazados por el pueblo de México” y que “hay que seguirlos denunciando y discutiendo”, pero insistió en que “difícilmente creo que tenga un asidero en México”.
Sin embargo, los números en redes sociales y el pánico de la prensa demuestran lo contrario: Verástegui ha irrumpido con fuerza en el debate nacional, como señaló el abogado Jean Carlo Portillo en X:
La reacción de los medios: pánico en la prensa progresista
La cobertura ha sido intensa. Medios como El Universal, Milenio, La Política Online y SinEmbargo han seguido de cerca el tema, aunque algunos con un claro sesgo en contra.
- El Universal: Informó con un tono neutral sobre la validación del partido.
- Milenio: Destacó que Verástegui ha recaudado 18.2 millones de pesos para impulsar su proyecto político.
- La Política Online: Confirmó que el INE validó su solicitud.
- SinEmbargo: Publicó un artículo agresivo titulado “Verástegui, el facha, no pasará”, revelando el miedo que la izquierda le tiene.
Pero si algo deja clara la reacción de la prensa, es que el ascenso de un movimiento auténticamente conservador ha encendido las alarmas del progresismo y los zurdos de siempre.
El ataque de Milenio: “Eduardo Verástegui, un peligro para México”
Uno de los ejemplos más evidentes de este pánico es la columna del periodista Víctor Manuel Sánchez Valdés, titulada “Eduardo Verástegui, un peligro para México”, publicada en Milenio.
El artículo busca desacreditar a Verástegui con argumentos reciclados de la izquierda:
- Lo acusa de ser una figura alineada con Trump y el Partido Republicano, insinuando que su lealtad está con Estados Unidos.
- Afirma que su agenda provida y profamilia representa un “peligro” para los llamados “derechos progresistas”.
- Critica su falta de experiencia política, olvidando que líderes como Milei y Bolsonaro rompieron el sistema precisamente por no ser parte de la élite política corrupta.
Pero lo más grave del artículo es la calumnia de que Verástegui hizo un saludo nazi en la CPAC. Un ataque infundado que demuestra la desesperación de la izquierda por frenar su avance.
Un fenómeno imparable
Mientras la prensa progresista ataca, Movimiento Viva México sigue sumando apoyo. Miles de mexicanos ven en este nuevo proyecto una alternativa real a la corrupción de los partidos tradicionales. Hartos de la “opoficción”, como la llama el productor al ser básicamente una oposición controlada y funcional al oficialismo; y de otros partidos que solo viven para parasitar pero jamás para servir.
Con la luz verde del INE para iniciar el proceso de convertirse en partido político, el respaldo de miles de ciudadanos y el pánico que ha generado en la izquierda, queda claro que Eduardo Verástegui ha llegado para quedarse.
Este es solo el comienzo. La batalla apenas empieza.